Según el último relevamiento de la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), en el país mueren entre 10 y 11 personas por día en siniestros viales. Aunque algunas organizaciones denuncian que las víctimas son aún más. En uno de cada cuatro accidentes se detecta alcohol en sangre en los conductores y en muchos casos el factor determinante es el exceso de velocidad. Desde el Ejecutivo impulsan penas más duras a conductores infractores, mientras que asociaciones civiles piden que haya más control

El Plan Mundial del Decenio de Acción para la Seguridad Vial 2021-2030, elaborado por la Organización Panamericana de la Salud/Organización Mundial de la Salud (OPS/OMS) y las Naciones Unidas, busca reducir un 50% la mortalidad en el tránsito. Con el fin de generar mayor concientización, desde el lunes 16 hasta el domingo 22 de mayo se está desarrollando la campaña internacional Calles para la Vida, que promueve una velocidad máxima de 30km/h. Con esta reducción estiman que podrían evitarse dos tercios de las muertes por siniestros. En Argentina, Luchemos por la Vida y Madres del Dolor han sido convocadas a promover la iniciativa.

Tweet de Luchemos por la Vida

“Para que sean efectivas, las leyes tienen que cumplirse. Y para que se cumplan, tiene que haber más control", indica Alberto Gasparini de Luchemos por la Vida.

“Educar y concientizar tienen que ser los pilares de las políticas para promover la seguridad vial”, señala a El Auditor.info Alberto Gasparini, integrante de la Asociación Civil Luchemos por la Vida. “La seguridad vial debería ser aprendida en las escuelas, haber más campañas en los medios, más concientización de los riesgos en la ciudadanía. Las leyes no sirven de nada si no hay una verdadera noción de lo peligroso y el alto costo que puede tener manejar alcoholizado o a alta velocidad”, asegura.

En el marco de la campaña, las organizaciones civiles entregaron ante el Congreso de la Nación un proyecto con modificaciones a la Ley Nacional de Tránsito como la de bajar de 40 a 30km/h la velocidad máxima, ya que permite tener más tiempo para reaccionar y frenar frente a un imprevisto, además de contribuir al medio ambiente con menos emisiones de carbono. 

“Para que sean efectivas, las leyes tienen que cumplirse. Y para que se cumplan, tiene que haber más control. Sin controles, no sirve de nada modificar o mejorar las leyes. Hay que ser serios y que los muertos no sean un número estadístico más. Hay familias que quedan destruidas por la negligencia de una persona en un accidente de tránsito. Tiene que haber más controles de alcoholemia, que las penalizaciones sean efectivas, que el scoring (descuento de puntos del conductor en función de las infracciones cometidas) se aplique. Es la única manera de alcanzar el objetivo de reducir a la mitad la cantidad de víctimas en siniestros viales”, sostiene Gasparini.

Alcohol cero

La Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) presentó ante el Congreso un proyecto de Ley de Alcohol Cero al volante para todo el país. Está a la espera de ser tratado en Diputados.

En abril de 2021, la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) presentó ante el Congreso de la Nación un proyecto de Ley de Alcohol Cero al volante para todo el país. El texto fue elaborado junto al Ministerio de Salud, la Secretaría de Políticas Integrales sobre Drogas de la Nación Argentina (Sedronar) y asociaciones de familiares de víctimas de tránsito. Actualmente, la normativa ya rige en nueve provincias y en varias ciudades del país. El proyecto está a la espera de ser tratado en la Cámara de Diputados.

El director ejecutivo de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, Pablo Martínez Carignano, destaca que la medida cuenta con un amplio apoyo de la sociedad. “Por ejemplo, la ANSV publicó en noviembre del año pasado una encuesta en Mendoza, San Juan y en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, donde 8 de cada 10 personas dijeron estar de acuerdo con que se establezca el límite cero para el alcohol al conducir. En diciembre, un estudio revelado por la Universidad de San Andrés realizado en ocho regiones del país, y de acuerdo a las iniciativas propuestas por el Gobierno Nacional, el 90% de los encuestados dijo estar a favor de una ley de alcohol cero al volante”, indica.

La actual Ley de Tránsito 24.449 establece para cualquier tipo de vehículos una tolerancia de hasta 500 miligramos (0,5) de alcohol por litro de sangre. Mientras que, para motocicletas o ciclomotores, hasta 200 miligramos (02). En tanto, esa misma ley determina que para transporte de pasajeros de menores y de carga, alcohol cero.

En CABA

Dos días antes del choque múltiple en Palermo, que dejó un saldo de dos muertos y diez heridos, la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) y el gobierno porteño firmaron un convenio para anticipar y detectar a los conductores temerarios y no esperar a que cometan un hecho vial que pueda tener consecuencias irreversibles.

Tweet de Seguridad Vial

Los conductores con licencia de conducir radicada en la Ciudad de Buenos Aires que acumulen 10 o más infracciones de tránsito graves podrán ser suspendidos. Las faltas de tránsito consideradas graves están estipuladas en el artículo 77 de la Ley Nacional de Tránsito, entre las que se destacan: conducción bajo los efectos del alcohol, estupefacientes y/o cualquier otra sustancia que disminuya las condiciones psicofísicas normales y la negativa a someterse al control; exceder los límites de velocidad permitidos; no respetar la señalización de los semáforos y adulteración de patentes.