De acuerdo a una encuesta de presupuesto internacional, Argentina cayó 10 posiciones en el ranking de transparencia. De acuerdo a un estudio realizado por la ONG con sede en Washington, International Budget Partnership, el país se ubicó en el puesto 40 de 100 países con una calificación de 50 puntos sobre 100. Esto implicó una disminución respecto de las mediciones de 2008 y 2010, en las que obtuvo un puntaje de 56.

De este modo, entre los países de la región Argentina quedó detrás de Brasil, Chile, México, Colombia y Perú. Las naciones que obtuvieron un nivel de transparencia presupuestaria similar al gobierno argentino fueron Costa Rica, Turquía, Bosnia, Ghana y Botswana.

El monitoreo, que fue realizado en el país por el Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (CIPPEC), evalúa si el gobierno central pone a disposición del público ocho documentos presupuestarios clave, y si los datos son oportunos, exhaustivos y útiles. En este último análisis, los primeros puestos fueron para Nueva Zelanda, Sudáfrica e Inglaterra.

Según explicaron desde CIPPEC, la Argentina produce cinco de los ocho documentos que International Budget Partnership supone que deben estar disponibles al público. Si bien desde el estudio pasado el país no dejo de publicar ninguno, en algunos casos no tienen tanto nivel de exhaustividad, explicó a gestionpublica.info Estefanía Casadei, analista del Programa de Política Fiscal de CIPPEC.

Desde el Centro confirmaron que el Poder Ejecutivo Nacional publica en tiempo y forma el proyecto de ley de presupuesto, la ley aprobada, los informes de ejecución durante el año y el informe de fin de año. El gobierno también publica el documento preliminar de presupuesto pero no lo hace a tiempo por lo que en el índice tiene un menor puntaje, comentó Casadei.

Además, el comunicado de CIPPEC añade que por su parte, el informe de la Auditoría General de la Nación (AGN) que evalúa de las cuentas que realiza el Gobierno se publica a tiempo pero debería incluir resúmenes ejecutivos con avances de las evaluaciones a partir de los seis meses posteriores al cierre del año fiscal. 

La especialista de Cippec aclaró que el presupuesto ciudadano es una forma sencilla de poner al alcance del público los datos fundamentales del presupuesto y la revisión de mitad de año indica cómo se está ejecutando todo lo que se presupuestó con anterioridad. En Argentina esto es algo muy importante porque las partidas se suelen modificar, agregó.

Por otro lado, calificó al control legislativo como débil: El congreso no tiene mucho control sobre la ejecución del presupuesto. Lo mismo sucede con la Cuenta de Inversión que es la prueba de todo lo que ejecutó el gobierno durante el año. La última Cuenta de Inversión aprobada por el Congreso es de 2007, añadió.

En cuanto al rol de la AGN, Casadei consideró que si bien el organismo ejerce un rol más exhaustivo, no se controlan toda la cuentas del gobierno Además, opinó que sería bueno que la información que publique con más periodicidad.

Consultada sobre el modo más propicio para mejorar la transparencia presupuestaria, la analista del Programa de Política Fiscal de CIPPEC recalcó la necesidad de que los ciudadanos sepan que acceso a la información es un derecho: Todos podemos exigir saber cómo se administra el dinero público.