Por primera vez en Argentina se llevarán a cabo las elecciones Primarias, Abiertas, Obligatorias y Simultáneas (PASO). Serán el próximo 14 de agosto y todos los ciudadanos están obligados a votar. La idea original era que sirvan para elegir los candidatos que representarían a cada agrupación en las presidenciales de octubre, pero luego del cierre de las listas, que derivó en que todos los partidos tuviesen un solo aspirante al Sillón de Rivadavia, la iniciativa, para algunos, perdió sentido.

Por varias circunstancias, ninguno de los partidos presentará más de un candidato a la presidencia. Sólo el Peronismo Federal había intentado llevar adelante su propia interna, pero el proyecto naufragó y, tanto Alberto Rodríguez Saá como Eduardo Duhalde irán en boletas separadas.

Las PASO, por otro lado, también servirían como una especie de eliminatorias para los partidos que aspiren participar en las presidenciales. Es que la agrupación que no alcance por lo menos el 1,5% de los votos por categoría no podrá presentar sus candidatos en las generales del 23 de octubre.

Gestionpublica.info entrevistó al encuestador Jorge Giacobbe a cerca de la nueva instancia electoral y opinó que las internas abiertas, como idea, son un paso a la civilización, la democratización y hacia la desfeudalización de los partidos. Pero, por cómo se manejo el proyecto, el consultor cree que el nuevo sistema impide la aparición de nuevas expresiones políticas: Ser concejal del conurbano será más difícil que ser piloto de la NASA, ironizó.

Uno de los partidos que se opuso a esta nueva modalidad es el GEN. Según contó el Diputado nacional Gerardo Milman a gestionpublica.info, su partido votó en contra de la sanción de la ley en el Congreso por considerar que carecían de sentido. Es que el objeto de la ley, que era que la ciudadanía participe en el armado de las listas, no es posible, explicó el legislador.

Por eso, el GEN planteó la suspensión de las primarias porque, para Milman, no tienen ningún sentido que los ciudadanos voten dos veces las mismas fórmulas. Además, añadió que la Constitución prevé un sistema de doble vuelta y, en estas condiciones, hay un intento de convertirlo en una triple vuelta.

En cuando a los costos organizativos, el Gobierno nacional a través del Ministerio del Interior llamó a licitación para la contratación del servicio de planificación, organización, carga, procesamiento y difusión del recuento de los votos, tanto en las primarias como en las generales. Por todo el proceso, resultó adjudicataria la empresa española Indra, que es una de las firmas que instaló las lectoras del Sistema Único de Boleto Electrónico (SUBE) y cobrará $ 134 millones. En las anteriores elecciones, en 2007, el contrato había sido casi por $ 100 millones menos, pero no incluía las primarias abiertas, ni tampoco hubo balotaje.

En cuanto a la postura de los diferentes partidos políticos Giacobbe argumentó que hay muchas razones para no estar de acuerdo con las primarias, pero que la gran queja y el análisis se va a dar después, cuando se conozca el resultado en cada distrito.

Por otro lado, el encuestador agregó que es importante permitir que todas las expresiones políticas se puedan presentar, para recuperar el contacto con la gente, pero que, así como están planteadas, las primarias abiertas son un sistema se exclusión y no de apertura.

La semana pasada, la jueza federal electoral porteña María Servini de Cubría confirmó que quien no se presente a votar en la primera instancia, y justifique el faltazo, no podrá participar de las generales de octubre.