La Auditoría General de la Nación (AGN), junto con la Defensoría del Pueblo y la Procuraduría Penitenciaria de la Nación, organizó el encuentro Organismos de Control y Gobierno Abierto, el cual también apoyaron distintas ONGs vinculadas a la temática, como la Asociación Civil por la Igualdad y Justicia (ACIJ).

Uno de los expositores durante la primera jornada del evento fue el Presidente del Tribunal de Cuentas de la Provincia de Buenos Aires, Eduardo Grinberg, quien consideró que el Gobierno abierto es parte del corazón de la transparencia, porque sin él los actos transparentes carecerían de la exposición necesaria.

En ese sentido, el titular del organismo de control bonaerense consideró que el gobierno abierto permite publicitar la gestión hacia la ciudadanía e interactuar con ella y sentenció: Hay dos tipos de gestión: la transparente y la corrupta.

En la corrupta apreciamos un exceso de poder por parte del sector público, con un alto nivel de discrecionalidad y sin control, lo que naturalmente constituye la fórmula casi perfecta, analizó el contador y continuó: Por el contrario, la transparencia es el tipo de gestión que todos anhelamos tener y requiere de muchas cosas. En principio, que la misma sea controlada por un organismo de control externo, que fundamentalmente tiene que tener como base sustancial la independencia.

En relación al control, Grinberg sostuvo que su posición es no involucrarse en cuestiones oportunas de conveniencia propias de los órganos políticos. Su independencia es fundamental para que su acción sea libre y no esté comprometida con actores de Gobierno, remarcó.

Por otro lado, el Presidente del Tribunal de Cuentas de la Provincia de Buenos Aires señaló que una buena gestión también requiere la permanente presencia de la accountability. Reúne los dos elementos sustanciales del control clásico; la rendición de cuentas y la determinación de responsabilidades por parte de los funcionarios públicos, enumeró.

A eso hay que agregarle las regulaciones y las normas penales que debe tener una sociedad que naturalmente sancione cualquier conducta fraudulenta o cualquier conducta delictiva que dañe el patrimonio público, agregó Grinberg.

Por último, adelantó que el Tribunal de Cuentas de la Provincia está iniciando su propia experiencia en materia de apertura de datos. Contamos con un plan de fortalecimiento institucional con apoyo de organismos internacionales, pudiendo así traer nuevos conceptos de transparencia y de auditoría de gestión.