Investigan el programa que asigna causas judiciales
Distintos organismos de control detectaron fallas en el software que sortea y adjudica las causas a los juzgados mediante un algoritmo. El sistema fue calificado de vulnerable y con la posibilidad de sesgar sus resultados.
La Auditoría General de la Nación (AGN), la Sindicatura General de la Nación (SIGEN) y la Unidad de Auditoria Informática del Consejo de la Magistratura fueron quienes manifestaron su preocupación. Estos informes fueron requeridos por el Consejo, luego de una serie de errores.
La SIGEN realizó un informe sobre el funcionamiento del Sistema de Gestión Judicial, Lex 100, donde detalló que el mecanismo informático presenta falencias y que no alcanza un nivel de madurez suficiente en concordancia con la criticidad de su función. También detectó que la documentación del sistema está desactualizada. Este informe fue enviado en enero al Consejo de la Magistratura.
Asimismo alertó sobre la seguridad del sistema y sus posibles riesgos debido a que determinados perfiles cuentan con la posibilidad de ver el estado de un bolillero en un momento dado, lo que permite contar con información para la predicción del resultado del próximo sorteo. La sala de servidores no cuenta con las medidas de seguridad acordes ya que presenta puntos ciegos en el circuito cerrado de TV, además de la ausencia de una alarma para el caso de que la puerta de ingreso quede abierta.
En una encuesta realizada por dicho organismo a los usuarios, el 80% expresó encontrar errores inesperados en el sistema y el 87% consideró que el sistema es lento.
¿Cómo funciona?
El Lex 100 realiza sorteos en base a la compensación de carga de trabajo, haciendo que ingresen al bolillero los juzgados con menor stock de causas. Un algoritmo define donde recaen las causas, atendiendo principalmente a la aleatoriedad y secundariamente a la compensación por carga de trabajo, o sea, cantidad de causas. Este sistema elige automáticamente los tres jueces que menos denuncias tienen en su stock y el número de bolillas puede ampliarse solo si no se cumple con esa premisa. Por ejemplo, en Comodoro Py la regla es que nunca puede haber menos de tres juzgados por sorteo.
De esta manera se garantiza que los que menos tienen son los que más causas deberían recibir, pero esto no siempre sucede. De los seis juzgados que entran al sorteo por quincena, tres son los que más chances tienen de recibir expedientes. Esto da la posibilidad de preveer resultados, sobre todo para los usuarios que tienen acceso al sistema. Según la SIGEN también existen posibilidades de alterar el cronograma de turnos, sin dejar rastros.
Este cronograma es fijado al inicio del año judicial y es posible modificar los turnos preestablecidos mediante la Asignación de Turnos Manual. No existe un procedimiento de revisión del mismo que pueda detectar cambios que no se correspondan con la grilla definitiva. Esto afecta a la transparencia del proceso, expresó el informe de la SIGEN.
AGN
Por su parte, la AGN realizó una auditoria que fue enviada al Consejo de la Magistratura a finales de 2017. Este informe es reservado. En diciembre, desde la auditoría, explicaron que el sistema presenta vulnerabilidades que resultan explotables para la eventual ejecución maliciosa, con riesgo para la confiabilidad y confidencialidad de los datos. En ese entonces denunciaron los atajos existentes para sesgar el resultado de un sorteo y la posibilidad de volver a sortear una causa en forma indeterminada sin que haga falta autorización. También, desde el organismo, señalaron que las claves no son seguras y que el acceso masivo a este sistema hace que sea sencillo operar desde cualquier perfil de manera maliciosa.
Error
En el sorteo de juzgados federales para la causa sobre la muerte del fiscal Alberto Nisman, se produjo una situación que llevó al Consejo a comenzar una investigación. En pleno sorteo, salió el nombre del juez Sebastián Casanello, entonces la pantalla comenzó a marcar error. Quedó parado el proceso porque un ingeniero del organismo entró en la sala de máquinas y anuló el procedimiento, esto habilitó que se realizara nuevamente. El juez sorteado fue Julián Ercolini, quien más causas sobre corrupción recibe en los últimos años, después de Claudio Bonadío. El centro de cómputos que ejecuta el sistema está en la calle Lavalle 1240, aunque el sorteo se hace desde una computadora en la Cámara Federal.
Otro de los errores fue la masiva adjudicación de causas vinculadas al kirchnerismo al Tribunal Oral Federal 9. En el caso de los tribunales orales federales, el sorteo se hace desde la Cámara de Casación, que en una resolución de la semana pasada reconoció el problema y ordenó garantizar presencia de las partes cuando se vaya a asignar una causa.
Luego de estos sucesos, el Consejo de la Magistratura encargó la realización de dichos informes de auditoría tanto a la SIGEN como a la AGN, para intentar ajustar el sistema y mejorar la seguridad informática. También le ordenó un tercer trabajo a la Unidad de Auditoría Informática que depende del propio Consejo. Solo resta que la Comisión Administrativa Financiera evalúe las propuestas. Por su parte, la jueza federal María Servini de Cubría elevó al Consejo y a la Corte Suprema una investigación técnica en la cual se observaban las vulnerabilidades del bolillero electrónico. Asimismo, el Lex 100 es investigado desde hace unos años por el Juez Ariel Lijo ante la presunción de haber costado más de lo que en realidad valía.
Robo de datos
En enero de 2017 se detectó un robo de datos en el interior del Consejo de la Magistratura. Desde el área de Seguridad Informática del organismo se denunció la desaparición de documentación sobre el Lex 100. Entre la documentación había un CD con el código fuente del sistema y un pendrive con parte del código con el que se encriptó la denuncia del ex director de Operaciones de la SIDE Antonio Jaime Stiuso ante la jueza Fabiana Palmaghini. El código impide que cualquiera pueda acceder a la declaración.