La Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable (SAyDS) aún no eliminó la totalidad de Policloruro de Bifenilo (PCB), un químico tóxico que se encuentra en transformadores eléctricos, pese a la existencia (desde el año 2002) de la Ley 25.670 que establece que antes del 2010 todos los aparatos con esta sustancia debían ser descontaminados.

La Auditoría General de la Nación (AGN) publicó un informe en el 2009 (cuyo periodo analizado fue entre 2002 y 2007), retomado recientemente por el portal elauditor.info, donde se plantea que no se llevaron a cabo las acciones para el tratamiento del PCB, sustancia que puede producir severos daños a la salud, como cáncer o inmunodeficiencias.

Gestiónpublica.info se comunicó con Beatriz Domingorena, subsecretaria de Fiscalización, Control y Prevención de la Contaminación de la SAyDS, quien afirmó que aun no está completo el inventario final de existencia de PCBs por lo que, cuando se cuente con esta información, se podrá estimar cuándo se eliminará la sustancia.

El informe de la AGN expresa que en el año 2002 comenzó a funcionar de hecho la Unidad de Sustancias y Productos Químicos (USPQ) como un grupo de trabajo encargado de la gestión de sustancias y productos químicos. La USPQ, que debía estar bajo la órbita de la Dirección Nacional de Ordenamiento Ambiental, a la fecha de la auditoria no estaba constituida. Gestionpublica.info consultó a la SAyDS por este tema, pero aún no se obtuvo respuesta.

La subsecretaria de Fiscalización, Control y Prevención de la Contaminación señaló que si bien no pueden señalarse trabas que hayan impedido la aplicación de la Ley Nº 25.670, acusó al carácter federal de la Argentina y la existencia de jurisdicciones provinciales particulares, por la demora en la eliminación de los PCBs. Falta en algunas provincias fortalecer las capacidades como autoridad de aplicación en el tema, agregó.

Domingorena comentó que el 4 de mayo pasado se realizó un taller, organizado por la Secretaria de Ambiente, que reunió a especialistas y responsables en el tema para intentar dilucidar las dificultades que han encontrado para implementar un sistema de gestión de PCB adecuado. Según la funcionaria, el encuentro fue muy rico y destacó los aportes que se hicieron tanto de los técnicos como del intercambio entre las provincias donde contaron qué fue lo que hicieron, los inconvenientes que encontraron y las metas propuestas.

Principio precautorio.

En la Ley de Presupuestos Mínimos para la Gestión y Eliminación de los PCBs se aplicó el principio precautorio. María Eugenia Di Paola, directora de la ONG Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN) explicó que esta designación proviene del Derecho Internacional y plantea que hay que actuar sin esperar a reunir toda la información si se supone que el efecto de una sustancia puede llegar a ser irreversible.

Este principio fue acuñado en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo (más conocida como RIO-92) que tuvo lugar en la ciudad de Rio de Janeiro en el año 1992.

Luego, los convenios de Basilea, Rotterdam y Estocolmo, a los cuales está suscripta la Argentina, exigen la eliminación de diversas sustancias entre las cuales se encuentra el PCB. A nivel internacional se ha llegado a la conclusión de que hay que descartarlos, señaló Di Paola. Y añadió: Estocolmo marca el 2025 como límite para la descontaminación. Ya que estamos atrasados con la Ley, creo que nos debemos como sociedad intentar cumplir con el convenio internacional.