Alicia Pierini seguirá al frente de la Defensoría del Pueblo porteña por cinco años más. Si bien aún falta que los legisladores lo voten formalmente en el recinto, los bloques mayoritarios ya acordaron que la abogada justicialista y ex subsecretaria de Derechos Humanos durante la presidencia de Carlos Menem sea quien continúe encabezando uno de los organismos de control más importantes de la Ciudad.

La negociación política para decidir la continuidad de Pierini no fue difícil. El consenso fue tal que las cuatro fuerzas más representativas de la Legislatura le pusieron la firma a su postulación oficial. Los diputados del PRO, del Frente para la Victoria, de la Coalición Cívica y de Diálogo por Buenos Aires coincidieron en que es "la mejor candidata".

De hecho, según confiesan de uno y otro lado, el resto de los postulantes fueron pensados más para acompañar que para competir contra Pierini. Y un rápido repaso por la lista de candidatos lo confirma: no hay nombres de peso que puedan disputarle el primer lugar.

Incluso en la audiencia pública que se realizó ayer para debatir las candidaturas, los breves discursos de los aspirantes dejaron en evidencia la intención de ser designados como defensores adjuntos, dando por descontado que la titularidad del organismo quedará en manos de su actual dueña.

Si bien Pierini no recibió impugnaciones, referentes de la oposición indicaron por lo bajo que, de cara a la reelección, la Defensoría porteña no publicó en los últimos meses ninguno de los informes más duros contra la gestión de Mauricio Macri. Sugieren que en los cajones del organismo esperan datos críticos sobre áreas sensibles y conflictivas como educación, salud y vivienda, que se darían a conocer a fin de año.

Desde su creación, hace diez años, la Defensoría es el organismo de control que más ha denunciado la falta de cumplimiento de muchos de los derechos que debe garantizar el Estado porteño y, por eso, lo estratégico de su función.

Antes de la audiencia de ayer, el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) le envió a la presidenta de la Legislatura, Gabriela Michetti, una carta en la que solicita que se garantice "la transparencia y la participación de la sociedad en la designación de los funcionarios", ya que "estas insuficiencias tienden a favorecer los acuerdos políticos por sobre la consideración de la idoneidad de las personas postuladas".

Consultada por Crítica de la Argentina, Pierini señaló que "para lograr los 40 votos necesarios, todas las designaciones tienen una base de acuerdo político. Pero ese acuerdo, que tiene que ser serio, garantiza que los organismos sean integrados por representantes de todos los bloques y que no sea una imposición de la mayoría".

Pierini también reconoció que su futuro seguirá siendo la Defensoría. "Todo parece indicar que hay un consenso importante y que continuaré en mi cargo, por eso en la audiencia hice un repaso de la gestión pero también resumí los lineamientos de los próximos años. Lo principal será articular con el área metropolitana en temas como vivienda, seguridad o salud en los que la General Paz es una frontera virtual".

Los cuatro defensores adjuntos serán acordados según la proporción de los bloques mayoritarios. El PRO propondrá que continúe Atilio Alimena y apoyará a Alejandro Agulleiro, actual subsecretario de Tercera Edad y hombre de Santiago de Estrada. El candidato del FPV es el director de la Comisión de Consumidores de la Legislatura, el radical K Andrés Elisseche, mientras que la Coalición Cívica postulará a Gerardo Gómez Coronado.