Publicado: 23-04-2011
 
Más allá de los acuerdos que surjan en torno a los distintos proyectos presentados, el debate de la norma deberá definir rápidamente dos cuestiones para lograr alcanzar el mayor grado de consenso posible antes de bajar al recinto. En primer lugar, se tendrá que definir cuál será el trato que recibirán aquellas personas físicas o jurídicas extranjeras que, una vez promulgada la ley, excedan el límite fijado por la misma para la posesión de tierras y después acordar de qué manera se hará el censo para saber con exactitud la cantidad de hectáreas productivas que tiene la Argentina.

Si bien ninguno de los proyectos plantea una expropiación, desde el socialismo insisten con revisar la forma en la cual fueron adquiridas esas tierras. En ese sentido, Benas sostuvo que el planteo pasa por que "se anulen todas las operaciones que hayan sido hechas de forma irregular en relación con la legislación del momento". Esto, añadió, ocurrió mucho durante el menemismo. "Se han vendido infinidad de tierras a capitales extranjeros y las operaciones son muy irregulares. Allí la Argentina recuperaría una gran parte de las tierras malvendidas en los ’90. La Auditoría General de la Nación ya ha detectado muchas de estas irregularidades; por eso, sería importante avanzar en ese sentido", dijo.