En julio de 2010 la Asamblea General de las Naciones Unidas reconoció el acceso al agua y al saneamiento como uno de los derechos humanos fundamentales. Sin embargo, tres de cada 10 personas en el mundo no tienen acceso al agua potable. "Hay un 25% de la población mundial que en 20 años va a vivir en países afectados por sequías o por escasez crónica”, señaló Sol Klas, la licenciada en Gerenciamiento Ambiental y actual secretaria nacional de Ambiente y Desarrollo Sostenible de la Asociación del Personal de los Organismos de Control (APOC).

Entrevistada en el programa El dedo gordo que se emite por Radio SI, Klas comentó que el país es "susceptible a la desertificación" y explicó que al aumentar radicalmente el uso global del agua dulce en el último siglo es muy poca la reserva accesible al ser humano. “Hay que entender que el derecho al agua es el más fundamental”, destacó.

Un uso irracional de servicios

El último informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) de Naciones Unidas alertó sobre las consecuencias de la crisis climática y concluyó que los cambios climáticos recientes son generalizados, rápidos e intensificados a causa de la humanidad.

En este sentido, Klas sostuvo que en un mundo donde están todas las alarmas activadas debido al uso irracional por parte de la humanidad de todos los bienes y servicios, hay que prestar suma atención al ciclo integral del agua. “Aquí es donde entra el control. Hay que ver cómo optimizar el uso y la calidad, cómo evitar la contaminación del agua, del cielo y del aire”, sintetizó.

El Dedo Gordo - Agua Potable

“La racionalidad pasa por respetar la capacidad de regeneración del recurso. Si uno usara racionalmente el agua, si no la contaminara, si devolviera el recurso tratado, no tendríamos problemas de dificultad en el acceso al agua potable para la población actual y proyectada”, explicó Klas, quien también coordina el Frente Sindical de Acción Climática. 

Para una sociedad más sustentable

La sanción de la ley de Educación Ambiental, en mayo de este año, significa un gran paso para continuar y potenciar la concientización social sobre aspectos del medio ambiente.

Si bien la legislación es un avance, ahora debe ser implementada mediante políticas públicas eficientes. “Adjudicarle a la ciudadanía la responsabilidad del uso racional y que la educación sea la solución a todo, no alcanza”, sostuvo la experta en ambiente.

Otro de los aspectos que destacó durante la entrevista fue que las empresas deben brindar información sobre los procesos productivos y estar al tanto de las nuevas normativas que se esperan con la ley de etiquetados. “Por ejemplo, hay países donde podés ver en el jean que te comprás cuánta agua se usó en todo su proceso. Uno puede elegir qué consumir, son estrategias de producción y consumo sostenible”, argumentó.

Adaptarse al cambio

El Frente Sindical de Acción Climática surgió como respuesta a las preocupaciones ambientales que se iban generando dentro de los diferentes sindicatos y a la necesidad de adaptarse a los cambios climáticos.

Para Sol Klas, la crisis ambiental es un tema que debería ser abordado y estar en la agenda de todos los sindicatos.

“Los sindicatos estuvimos históricamente preocupados por temas salariales y cuestiones de desarrollo laboral, pero la verdad es que estamos viendo el árbol y no el bosque. El bosque nos lo está imponiendo la crisis climática en la que estamos inmersos y si no prestamos atención a eso y nos adaptarnos a esta nueva realidad climática nacional, regional y mundial vamos a quedar un poco mal posicionados”, reflexionó su coordinadora.

Además sostuvo que los trabajadores necesitan tener un planeta donde poder desarrollarse, tanto profesional como espiritualmente. “Si no tenemos la posibilidad de acceder a los recursos naturales y a los bienes y servicios ecosistémicos, no hay forma de que podamos seguir teniendo nuestras actividades”, agregó.