El III Congreso Argentino de Control Interno, celebrado esta semana, brindó un aporte valioso en relación al teletrabajo y la gestión de auditorias. Tres expositores expusieron su mirada crítica de esta modalidad de trabajo, exhibieron desafíos y oportunidades en relación al control gubernamental.

Graciela Braga, auditora y consultora independiente, inició la exposición planteando nuevos desafíos en el trabajo remoto que “llegaron para quedarse y se deberían comparar con las características del trabajo presencial”. En este sentido, sostuvo la necesidad de firmar un acuerdo de confidencialidad que proteja la información. 

Sus preocupaciones, expuestas en la conferencia, giraron en torno a los incidentes de seguridad, la falta de privacidad en la información, la utilización de los recursos tecnológicos y los controles del acceso físico que, actualmente, se encuentran imposibilitados. 

“La tecnología y los recursos humanos son los más críticos que hoy tiene una organización”, agregó la consultora. Asimismo, marcó que la tecnología permite monitorear continuamente la actividad y detectar más rápido la actividad fraudulenta en una auditoria.

Teletrabajo: desafíos en el control gubernamental

Salud y seguridad en tiempos de teletrabajo

El congreso continuó con “El factor humano: impacto y desafío”, presentación de Oscar Rebolledo, auditor interno titular de la Universidad Nacional del Comahue. Al iniciar su exposición se preguntó “¿Qué pasó con la salud y la seguridad en el trabajo durante la pandemia?”. La respuesta refirió a la falta de herramientas con respecto a la salud, seguridad e higiene durante el teletrabajo. 

“Los empleadores tienen la responsabilidad de gestionar los riegos laborales de los teletrabajadores, agregó el auditor. Enumeró problemas recientes, producto de la crisis sanitaria, como los riesgos psicosociales, la sobrecarga de conectividad, el deterioro de la salud mental, fatiga visual, obesidad, entre otros. 

Por otro lado, Rebolledo remarcó la importancia del derecho a la desconexión y a prevenir posibles adicciones a la tecnología. Además, incitó a un “equilibrio del trabajo y la vida privada" por considerar que "actualmente no hay límites”. 

Creció la violencia de género 

La desigualdad de género fue otro eje elegido por el auditor Rebolledo. “Hemos visto y escuchado que muchos informes indican que durante el confinamiento aumentó la violencia de género. Para muchas mujeres ir al trabajo significaba un alivio, un área segura. El confinamiento las expuso”, afirmó el contador. 

El bloque dedicado al teletrabajo finalizó con las palabras de Silvia Núñez, gerenta de auditoría interna del negocio downsteam YPF. Presentó desafíos pensando en un corto y mediano plazo. Uno de ellos fue “mantener actualizada la información y el análisis de riesgos dinámicos”. 

En esta línea, Núñez mencionó que “innovación, liderazgo, influencia social, capacidad de trabajar con equipos, uso y desarrollo de la tecnología, serán primordiales de aquí a cinco años”. Sin embargo, detalló que esto no está orientado específicamente en teletrabajo.

Para finalizar, indicó habilidades que -según ella- son de vital importancia en relación al teletrabajo: autogestión, enfrentar desafíos digitales y emitir informes de alto impacto.