*Jornada anticorrupcion*

Los organismos de control de todo el país reclamaron esta semana al Gobierno nacional y también a las provincias que inviertan en ellos más presupuesto, porque –advirtieron– la falta de dinero debilita y acota las auditorías. El pedido lo realizaron el miércoles durante la cuarta reunión anual del secretariado permanente que los agrupa.

En un hotel céntrico porteño, los titulares de la Auditoría General de la Nación (AGN), la Auditoría General de la Ciudad (AGC), y los tribunales de cuentas del interior coincidieron en que Argentina es el país de la región que menos plata destina al control.

Según cifras a las que pudo acceder Perfil, el promedio en los países de América latina es del 1% del presupuesto, mientras que en Argentina el monto apenas representa el 0,04% de los recursos.

Leandro Despouy, presidente de la AGN, explicó a este diario que las auditorías permiten que el país se ahorre "muchísimo dinero". "Nuestros trabajos evitan al Estado hacer gastos innecesarios y facilitan a las autoridades una administración eficaz de los recursos", agregó.

Sin embargo, los auditores advirtieron que la capacidad de operar de los organismos no sólo se encuentra reducida por cuestiones presupuestarias sino también por la restricción de atribuciones que aplican los poderes legislativos y ejecutivos en las 24 jurisdicciones.

El presidente del secretariado permanente, Rubén Quijano, consideró en diálogo con Perfil que al poder "no le agrada el control", y opinó que por eso en varias provincias las autoridades limitan las facultades de los tribunales de cuentas.

La presidenta de la AGC, Sandra Bergenfeld, coincidió con el diagnóstico de Despouy y Quijano: "Lo ideal sería que se destinara al control el uno por ciento del presupuesto. Y que nuestros auditores tuvieran oficinas en todos los ministerios y secretarías que son auditadas. Ahora, ante nuestra insistencia, nos están proveyendo de oficinas para nuestros inspectores".

Avanzada K. En lo que pareció una respuesta al reclamo de los organismos, el kirchnerismo organizó un congreso de organismos de control. Ocurrió un día después en la Cámara de Diputados. Allí, el senador Nicolás Fernández (FpV) advirtió que la AGN no debe realizar investigaciones sino limitarse a ser un apéndice del Congreso, tal como establece la Constitución Nacional.

Puertas adentro de la AGN esta afirmación generó estupor y se interpretó como una avanzada más del oficialismo para maniatar a los organismos.

Esto sucedió en las vísperas del cambio de autoridades en la AGN, en la que el kirchnerismo intenta renovar el cargo, por ocho años, a dos auditores a quienes algunos políticos cuestionan su pasado menemista.