El 25 de agosto Oscar Lamberto asumió como titular de la Auditoria General de la Nación (AGN) luego de que Ricardo Etchegaray dejara la presidencia acorralado por su procesamiento. Para formalizar la designación fueron necesarias las firmas de los presidentes de las cámaras de Diputados y Senadores: Emilio Monzó, quien acompañó a Lamberto en el acto de asunción, y vice Presidenta Gabriela Michetti.

Lamberto fue diputado y senador nacional por más de 20 años consecutivos. Ahora estará al frente de la AGN hasta 2019. Su designación fue propuesta por la presidencia del PJ ejercida por José Luis Gioja, ex gobernador de San Juan.

Hace casi 25 años siendo Diputado de la Nación votaba la aprobación de la ley de Administración Financiera, donde en uno de sus capítulos se creaba la Auditoría General de la Nación. Nunca imaginé que por esas vueltas del destino iba a tener la responsabilidad de presidir el máximo organismo de control externo de la Nación. Y mucho menos a una altura de la vida donde la sociedad nos asigna roles distintos, remarcó Lamberto en su discurso de asunción frente a disntitos funcionarios, entre ellos Daniel Scioli y Juan Carlos Maqueda.

La presencia de representantes de los tres poderes del Estado es no solo un reconocimiento a su trayectoria, sino también el deseo que su experiencia y su capacidad estén al servicio de mejorar todos los días el funcionamiento de las instituciones de la democracia argentina, expresó el Auditor Jesús Rodríguez.

Quizás sea un honor exagerado asumir tanta responsabilidad y no puedo menos que agradecer a los responsables de la decisión, en especial al presidente del partido y al secretario Miguel Pichetto, agradeció Lamberto a Luis Gioja quien estaba presente en la sala.

En su discurso, destacó las tareas realizas por Leandro Despouy en sus doce años de gestión y dijo: Hoy es un organismo visible, no sólo por este magnífico edificio que la cobija, sino por el grado de inserción que ha logrado en la sociedad, hecho que sin duda es de la cosecha personal del anterior presidente quien en su constante presencia en los medios sacó la AGN del anonimato.

Tengo la esperanza de comenzar una etapa donde a la AGN se la mencione por sus informes y que el trabajo silencioso de todos los días sea eficiente y productivo. Vengo a trabajar y hacer que la gente trabaje. En los últimos años accionamos para poner nuestro organismo a la altura de los mejores del mundo, con una profunda inserción internacional, haciendo auditorías coordinadas que se utilizan de referencia en todo el planeta, expresó y agregó que apuntará su gestión a trabajar en red y a fomentar la digitalización de las actividades. Tenemos como meta usar cero papel. Las fotos, vídeos, gps, información satelital, drones, constituyen las nuevas herramientas de las modernas auditorías y las vamos a impulsar decididamente. La capacitación permanente es indispensable para contar con los mejores profesionales, hay que poner en funcionamiento el Instituto de Capacitación, aprobar definitivamente el uso de las normas de INTOSAI y crear la matrícula de Contadores Gubernamentales, detalló.

Deuda pendiente

Lamberto tampoco olvido recordar la deuda que tiene el Congreso con la AGN: la reglamentación del artículo 85 de la Constitución Nacional. El artículo 85 rige hoy en día sin su debida norma reglamentaria. Al momento que el Honorable Congreso decida sancionar la respectiva Ley constitucional, sería deseable que se tuviera en cuenta toda la experiencia acumulada y se avanzara en una legislación que contemple las doctrinas modernas en la materia. En la AGN hemos demostrado que la transparencia es posible, remarcó.

El control que tuvo un origen monárquico, hoy es el control del pueblo y este organismo debe construir las herramientas para que sea efectivo. La corrupción es el cáncer de la democracia y para combatirla es necesario construir un mejor Estado con oposición de intereses e información accesible, detalló el flamante titular de la AGN.

Para cerrar, destacó que más allá de su filiación partidaria, su compromiso ante todos es presidir la AGN de todos los argentinos, porque lo primero es la patria.