En octubre de 2015 Paraguay, Bolivia y Argentina desmontaron 25 millones de árboles en la región del Gran Chaco, según lo denunciado por la ONG paraguaya Guyra. La deforestación es equivalente dos veces y media a la superficie de Buenos Aires.

En septiembre del año pasado se registró un desmonte de 40.551 de hectáreas y luego, en octubre, se registraron 50.574. Esto es igual a un ritmo diario de 1.686, según los informes de la organización paraguaya. En cuanto a las proporciones de territorio por país, el 55% corresponde a territorio paraguayo, el 34 a la Argentina y un 11% a Bolivia. Guyra recogió imágenes satelitales que registraron los desmontes y de ese modo estableció que el promedio de deforestación diaria de ese mes en Paraguay fue de 925, en Argentina 576 y en Bolivia 185 hectáreas diarias.

Como consecuencia de la tala de árboles, desde la ONG denunciante aseguran que se provocó una disminución de las superficies cubiertas por agua y 38.806 focos de incendio. El Gran Chaco es un área protegida por lo que los cambios de uso de las tierras tienen que ser registrados de forma oficial. En Argentina, por ejemplo, rige la Ley de Bosques que señala por zonas los usos permitidos.

Importancia del Gran Chaco

El Gran Chaco Americano es una ecorregión boscosa de excepcional diversidad, tanto ambiental como social. Por su extensión (1.066.000 km2), constituye la mayor masa boscosa de Sudamérica, después de la Amazonía, y comprende territorios de Argentina (62,19%), Paraguay (25,43%), Bolivia (11,61%) y Brasil (0,77%). La amplia variedad de ambientes que presenta, como bosques, arbustales, pastizales, sabanas, esteros y humedales, se traducen en una gran diversidad de especies vegetales y animales que hacen de esta región un área clave para la conservación de la biodiversidad.

El Gran Chaco es el hogar de decenas de pueblos originarios como los guaraníes, los énxet, qom, sanapaná o ayoreo, entre otros. En la región chaqueña, entre Paraguay y Bolivia, vive además el único grupo indígena que queda en aislamiento voluntario fuera de la Amazonía, los ayoreo totobiegosode. También es el hábitat natural y mejor conservado para animales como el yaguareté (jaguar en guaraní), la nutria gigante (arira'i), el oso hormiguero gigante (jurumi) y el tatu carreta, la especie más grande de armadillo que existe en Paraguay.

Medidas argentinas

En el mes de febrero, después de la presentación de los informes de la ONG ambiental, el ex gobernador Jorge Capitanich instrumentó una modificación de las normas legales para que se realizaran correctamente los desmontes selectivos (silvopastoriles) pero tales medidas fracasaron. En la práctica, se repiten los desmontes encubiertos y se continúa violando el régimen legal, con grave afectación del ecosistema de El Impenetrable.

Auditoría General de la Nación

Desde hace unos años, la Auditoría General de la Nación (AGN) denuncia la falta de aplicación de la Ley de Bosques. Según el organismo de control, la normativa no se cumple y los cambios de usos en las regiones no son oficiales ni están publicados de forma correspondiente. En el informe que analiza la aplicación de la Ley 26.331 de Presupuestos Mínimos de Protección Ambiental de Bosques Nativos durante el periodo de 2007-2013, aseguran que se realizaron desmontes que no cumplen con el requerimiento de la realización de audiencias públicas previas.

Por otro lado, entre las observaciones de los auditores se destaca que el Programa Nacional de Protección de los Bosques Nativos recibe cada vez menos fondos del presupuesto nacional y cuando los recibe tienen seis meses de demora, lo cual complica la planificación de tareas. Además no tienen metas cuantitativas, plazos calendarizados, indicadores de desempeño ni acciones correctivas. Y el sistema de rendición de cuentas implementado por la Jefatura de Gabinete de Ministros es ineficiente.

Sobre la Ley 26.331

La Ley 26.331 es un instrumento legal de suma importancia para la conservación de los bosques nativos y es la primera ley nacional sobre presupuestos mínimos de protección de los recursos naturales que ha sido reglamentada.

Establece una serie de instrumentos de gestión de los bosques nativos orientados a controlar la deforestación y el avance de la frontera agropecuaria. Tiene un enfoque participativo y promueve la garantía de los derechos de las comunidades indígenas. Asimismo, estipula la creación de un fondo para financiar la conservación y el manejo sustentable de los bosques nativos. A nivel nacional, la autoridad de aplicación es la Secretaria de Ambiente y Desarrollo Sustentable (SAyDS).

En noviembre del año pasado, Leandro Despouy, ex titular de la AGN, presentó un informe en el Senado sobre la gestión ambiental de los doce años del gobierno anterior. Allí destacó la importancia de la plena aplicación de la Ley de Bosques y su implementación. Entre las denuncias que enunció Despouy en esa ocasión, figura el bajo presupuesto que recibe la Ley de Bosques y la desviación de partidas presupuestarias de dicha norma para publicidad oficial.


El principal aspecto de la Ley de Bosques, es decir, el ordenamiento territorial, no produjo el resultado que se esperaba, sostiene el informe que comentó Despouy, al asegurar que la consecuencia directa de ello fue la deforestación de grandes extensiones de bosques como lo es ahora en el Gran Chaco.

Pasos a seguir

El 13 y 16 de junio la ONG Guyra realizará el Encuentro del Chaco bajo el lema Por el Chaco que queremos y organizado por Redes Chaco, en Villamontes, Bolivia. Esta jornada será el 3er Encuentro Mundial del Gran Chaco Americano. El objetivo es generar un espacio que contribuya a la toma de decisiones políticas locales y transfronterizas que optimicen las condiciones sociales y naturales de la región, logrando una mayor visibilización y un compromiso a nivel internacional.

Informes mes a mes de Guyra

http://www.guyra.org.py/index.php?option=com_phocadownload&view=category&id=2&Itemid=141&lang=es