La Procuraduría Penitenciaria Nacional (PPN) presentó su informe trimestral sobre las muertes dentro de las cárceles. GestionPublica.info se comunicó con el Coordinador de la Oficina de Investigación de Casos de Fallecimiento, Ramiro Gual, quien aseguró que las cifras volvieron a subir y son alarmantes.  Han crecido las muertes violentas, categorizadas como homicidios, suicidios o un accidente que acabe con la vida del interno.  Representan el 50 por ciento del total, detalla el documento.

Como cada 3 meses, el organismo de control encargado de revisar el trabajo que se realiza dentro de las prisiones federales dio cuenta de un nuevo informe en el cual se muestra como ha crecido la cantidad de muertes violentas dentro de las cárceles. Lo que hacemos es sistematizar un proceso estandarizado ante cada muerte que ocurra dentro de prisión o bajo custodia de la misma en otra institución como puede ser un hospital, confirmó Ramiro Gual a este medio, y agregó que nuestra pretensión es poder describir cada vez mejor cada muerte que ocurre, cuantificar e identificar las causas y también poder avanzar sobre las prácticas estatales que generan los decesos.

Según cuenta el informe, el crecimiento de la cantidad de fallecidos dentro de las cárceles viene subiendo exponencialmente desde el año 2011. Normalmente había un promedio de 50 muertes por año que había bajado entre 2009 y 2010.

Violencia institucional

Conforme a las advertencias y denuncias de distintas ONG sobre violencia institucional, este medio le consultó a Ramiro Gual sobre el tema y el mismo constato que lo que se denuncia refleja la realidad que se vive hoy dentro de las cárceles argentinas y en particular en las prisiones federales.

La violencia se utiliza como una herramienta de gestión del encierro preponderante ya sea para garantizar el orden, para advertir a quien lo quiera romper o para restablecerlo, explicó Gual y añadió que se hablan de cifras exorbitantes, pero por más que sean ciertas acá lo que importa es empezar a discutir políticas públicas para erradicar algo que está completamente arraigado a la cultura penitenciaria actual. No existe una fuerza política para oponerse hoy a la mano dura que existe dentro de estas instituciones, insistió.

Imputabilidad

El 2015 es un año atravesado por las elecciones presidenciales en nuestro país y uno de los candidatos al cargo, Sergio Massa, tiene como objetivo bajar la edad de imputabilidad para acabar con la delincuencia. Sobre este tema, Gual observó que ha crecido mucho la persecución hacia los jóvenes y la venta de espejitos de colores de que la inseguridad es producida por los chicos, algo que empíricamente no puede ser revalidado.

El sistema penitenciario argentino está articulado de tal forma que los chicos jóvenes no se cruzan con los mayores dentro de la prisión, explicó. La franja etaria más joven, que es de 18 a 21 años, tienen establecimientos penitenciarios específicos para ellos o sectores dentro de una prisión, lo que hace que se crucen poco con los mayores. Igualmente, no hace falta que se encuentren para que las cárceles sean violentas, concluyó el Coordinador de la PPN.