Contaminación urbana, rural, industrial y minera
Publicado: 22-03-2012
Río Negro.- La Patagonia es una de las reservas mundiales de agua, que concentra la atención de los países del primer mundo por su potencial en un recurso que será escaso en los próximos años. Por su condición de elemento vital e indispensable el agua es un derecho inalienable de todos los seres vivos, dependiendo la calidad de vida de la calidad del agua.
El desarrollo de las actividades antrópicas cotidianas e industriales han producido impactos en este recurso: la contaminación del agua está asociada a la historia del desarrollo de las sociedades y se agrava con el desarrollo de la industria y el surgimiento de grandes concentraciones urbanas.
Actualmente nos encontramos con un desarrollo económico productivo contaminante y con la necesidad de preservación del recurso. En esta contradicción surge la urgencia de una mirada sustentable y sostenible del mantenimiento del recurso agua para las generaciones actuales y futuras.
La numerosa asistencia que se vio convocada por el Primer Foro Patagónico del Agua, así como la heterogeneidad de los concurrentes, evidencia el alto grado de preocupación que existe en la sociedad en relación con el recurso agua.
La sociedad civil percibe al Estado con dificultades en la fiscalización del cumplimiento de la normativa vigente para el uso sustentable del recurso. Sin embargo también percibe la diferencia entre organismos cuyo trabajo es sistemático y responsable y organismos que no cumplen con las expectativas.
De las exposiciones y debates se evidencia el alto grado de complejidad que abarca el uso del recurso agua: industrial, urbano, rural y minero. El complejo lenguaje técnico propio de cada área demanda una traducción que lo haga asimilable al ciudadano común.
A partir de las exposiciones de los especialistas, desarrolladas en el Foro, se concluye que el compromiso y responsabilidad asumidos por los técnicos en sus tareas encuentran como obstáculos: normativas que no se cumplen, ausencia de otras y falta de voluntad política en los niveles reales de decisión, dificultando el logro de sus objetivos. Resulta necesaria la jerarquización del trabajo técnico dotándolo de las herramientas adecuadas para impactar efectivamente en el uso sustentable del recurso.
La información que circula cotidianamente en la sociedad resulta parcial y desarticulada, lo que dificulta la comprensión integral del tema. Frente a hechos puntuales de contaminación, la comunidad a veces manifiesta desorientación hasta encontrar los canales adecuados.
Hay lugares privilegiados en la sociedad para ejercer la comunicación (medios de comunicación y Educación, por ejemplo) y llegar a la población con mensajes que propicien cambios de conducta y le permitan generar acciones responsables en el cuidado del recurso.
El espacio local está percibido como el lugar a partir del cual la sociedad civil puede defender con éxito el recurso agua. La participación popular, asociada a la voluntad política y a la tarea técnica es la conjunción ideal para detener o revertir procesos de contaminación.
Se propone reemplazar los conceptos "pasivo ambiental" y "responsabilidad social empresaria" por el de "pasivo social empresario". Este concepto transparenta que las actividades industriales tienen impacto en la calidad de vida de la comunidad por lo que la empresa debe responsabilizarse por los efectos causados por ese impacto.
Se recomienda la capacitación, concientización y divulgación sobre temas referentes al medio ambiente y calidad de vida relacionados con el agua, implementando cursos de educación ambiental sistemáticos y asistemáticos.
Se recomienda trabajar asociados a los medios de comunicación para la difusión de hechos de contaminación que se produzcan y para la promoción de las conductas adecuadas para el cuidado y protección del agua.
Se recomienda a nivel municipal contar con organismos de control ambiental, quienes serán los encargados de revisar las normativas vigentes relacionadas con el agua.
Se recomienda propiciar la articulación de redes entre organismos estatales, privados, no gubernamentales y otros, con el fin de potenciar su capacidad de acción para el uso sustentable del agua.
Se recomienda acudir a los canales de representación política provincial para que traten a nivel nacional el tema del cuidado y protección del recurso agua.
Se recomienda la revisión de la normativa minera vigente a fin de modificar las actuales leyes que permiten una explotación contaminante y la pérdida de soberanía sobre el recurso.
Se recomienda que se propicien leyes mineras cuya intencionalidad indique claramente las acciones de prevención necesarias para mantener un medio ambiente sustentable y que impidan la instalación de explotaciones contaminantes.