Publicado: 18-08-2011  

Catamarca.- Una indagación del Tribunal de Cuentas buscará determinar si el hundimiento del bufet sur en el Estadio Bicentenario pudo obedecer a la mala calidad de la construcción o de los materiales utilizados, a pesar de que la explicación oficial afirma que fue consecuencia de filtraciones de un caño de agua.

El trabajo apunta también, entre otras cuestiones, a conocer si fue adecuado el proyecto avalado por técnicos del Ministerio de Obras y Servicios Públicos, luego ejecutado por la constructora privada Capdevila.

El presidente del organismo de contralor, Mardonio Díaz Martínez, confirmó que se aprobó el inicio de una doble auditoría técnica y contable sobre la obra más emblemática de la gestión de Eduardo Brizuela del Moral, tras conocerse a través de este diario los inconvenientes en el bufet, que fue finalmente demolido.

En el caso de la pesquisa técnica -señaló el funcionario-, el TC pondrá bajo la lupa la parte física de la infraestructura, a través de un equipo de ingenieros que revisarán la construcción en detalle.

En tanto, en el aspecto contable, se pretende determinar si "hubo un menosprecio de los recursos públicos en los errores cometidos", señaló.

Sin adelantar opinión sobre la materia, dijo que las dos auditorías apuntarán a "conocer si se produjo o no un daño" al patrimonio del Estadio.

La semana pasada, EL ANCASTI informó sobre la falla del bufet sur, que había cedido y hundido medio metro, además de presentar una peligrosa inclinación.

La noticia cayó muy mal en Casa de Gobierno, y generó retos y pedidos de explicaciones del gobernador Eduardo Brizuela del Moral, quien tuvo que salir a defender en reiteradas oportunidades el proyecto. También motivó una reunión de referentes de la empresa y funcionarios responsables de la obra, para determinar cómo se solucionarían los inconvenientes.

Finalmente, el titular del área, Juan Acuña, confirmó que la parte con fallas sería demolida completamente y levantada a nuevo, en teoría a costo de la empresa, por encontrarse vigente el período de garantía.

El Gobernador, no obstante, se anticipó a la aparición de nuevos problemas en la obra y, ante una consulta que le hicieron en Tinogasta, dijo: "Dios quiera que no, pero mañana puede suceder un problema de cableado, picaportes u otra cosa". Y recordó que "es una obra de miles de metros cuadrados que puede tener inconvenientes".


Ayer ingresó a la Cámara de Diputados el proyecto impulsado por la peronista Silvia Moreta, con el que se instará al Gobierno provincial para que informe sobre las fallas detectadas en el bufet Estadio Bicentenario, que tomaron estado público a través de El Ancasti.

La legisladora requirió información sobre la magnitud de los daños, los motivos y las reparaciones que serán necesarias ejecutar, entre otros datos.

La semana pasada, la legisladora cuestionó en duros términos al Ejecutivo por este tema, comparando el Estadio con la Torre de Pisa, lo que provocó la ira del ministro Juan Acuña.