A nueve meses de haber retirado su candidatura como Procurador General de la Nación, tras verse involucrado en un escándalo mediático que incluyó una denuncia penal por falsificación ideológica de documento público, el Síndico General de la Nación, Daniel Reposo, recibió a dos periodistas de gestionpublica.info en su despacho. En una charla distendida, se refirió, entre otros temas, a la decisión (tan cuestionada por la oposición) de retirar de la web la totalidad del contenido de los informes que elabora el organismo. Además, habló del vínculo que mantiene con la Auditoria General de la Nación y brindó detalles del último encuentro que mantuvo el Secretariado Permanente de Tribunales de Cuentas en Mar del Plata.

Pasaron ya nueve meses del conflicto en torno a su candidatura como Procurador General de la Nación, ¿Qué balance hace de aquella situación?

Independientemente de la campaña mediática que se ha hecho, esto muestra que cuando se da una situación así es porque hay sectores que les molesta mucho el control. Desde la Sindicatura se ha controlado la Ley de medios y a Papel Prensa. Vimos el desfalco que se ha hecho en torno a la única empresa en Argentina que provee papel para diarios, donde la gente de La Nación y Clarín lucraban con esto en desmedro de muchos otros que no pertenecían al grupo. Yo estoy más tranquilo porque la situación ha acontecido felizmente. Hoy hay una procuradora que tiene todos los atributos, que ha sido votada por todos los sectores. En cuanto al resto, siempre hay que privilegiar lo institucional por sobre lo personal.

En declaraciones recientes usted mencionó que se aumentó el presupuesto y la preponderancia de la SIGEN dentro del Estado. ¿En qué aspectos impactó este crecimiento?

Aquellos que pregonan que hay que reforzar el control, en los momentos que fueron gobierno lo primero que hicieron fue aplicar el sistema de retiros voluntarios y recortar el presupuesto de los organismos de control. Por suerte estamos dentro de un gobierno que fortaleció no sólo presupuestariamente a la SIGEN, sino que generó nuevas herramientas e incorporó trabajadores especializados. Estamos trabajando muy fuertemente con la Universidad de Buenos Aires, la Universidad Tecnológica Nacional y la Universidad de La Matanza para que tengan materias específicas sobre control. Para ingresar a la Sindicatura se prioriza  aquellos que tienen un muy buen desempeño en sus carreras. Este es un compromiso con el Estado. Quienes trabajan deben saber que son unos privilegiados y sobre todo tener en cuenta que su trabajo ayuda a la gestión de un gobierno. Antes las capacitaciones se realizaban fuera del horario de trabajo, y ahora se está profesionalizando con carreras universitarias que se dictan dentro del seno del organismo de control.

La importancia de la idoneidad para ingresar a la gestión pública es algo que la presidenta Cristina Fernández comentó en varias oportunidades.

Es muy importante que no sólo tengan idoneidad, sino que tengan compromiso; que puedan acceder a través de un sistema transparente. El ingreso debe ser transparente como así también ascender en función a sus méritos y a su capacitación. Para esto se cambió el sistema. Con una capacitación acorde a sus funciones, ahora pueden ascender cada dos años. Esto genera un fuerte impulso en lo que es la carrera administrativa dentro del Estado. 

¿Cuánta gente trabaja en SIGEN?

Hoy tenemos 600 personas trabajando en la Sindicatura. En 2002 había 326. Esto hay que verlo en relación a la cantidad de organismos que están bajo la SIGEN. Tenemos 184 organismos dentro del sector público y 37 empresas o entidades en las que el Estado tiene una participación mayoritaria.

Respecto al aumento presupuestario de la SIGEN, mucho se ha escuchado desde la oposición que el gobierno relegaba a los organismos de control. Ricardo Gil Lavedra, presidente del bloque radical en la Cámara baja, fue muy crítico en este sentido. ¿Qué opinión le merece este tipo de cuestionamientos?

Hay que ver quiénes son los que critican. Mientras fue ministro (de Justicia) Gil Lavedra quienes estábamos en la SIGEN sufrimos el más atroz retiro voluntario. Con lo cual, me parece que tenemos que poder acercarnos a la realidad y ser responsables con lo que decimos. Gil Lavedra jamás se acercó. Se acerca solamente cuando se enciende una cámara de televisión y hablan sin tener el más mínimo conocimiento de lo que sucede. Nadie de la oposición se ha preocupado por saber qué pasa en los organismos de control. Cuando no se tiene idea ni información, mal se puede hablar. Esto pasa por la irresponsabilidad de muchos. Basta ver nuestros indicadores, la cantidad de información que producimos Y la cantidad de convenios de fortalecimiento. Los números son claros en esto.

Otro punto que cuestiona la oposición es que se dejaron de publicar los informes de auditoría en la web ¿Por qué se adoptó esta medida?

Hay que ver el contexto. En ese momento estaba toda la oposición nucleada en trabar cualquier área de gestión del gobierno nacional. La mayoría tiene que gobernar y la minoría tiene que controlar, pero juntos tienen a cargo la gestión de un país. Esto es lo que exige la sociedad. Hay que ser muy serios a la hora de hacer declaraciones porque trabajamos todos por la construcción. Cuando esto no se entiende, aparece el caos.

¿Analizan revertir la medida? Es decir, ¿volver a publicar la totalidad del contenido del informe en Internet?

Hoy un informe en el mismo momento que va al organismo, se publica y una vez recibido por la máxima autoridad se publica en Internet. Están la totalidad de los informes, lo que hay es una síntesis de cada uno, en el tiempo que se realizaron y lo que conlleva. Cualquier persona que requiera ver un informe, lo pide por nota, por la web, correo, da sus datos y nosotros se los otorgamos en la medida que cumpla con los requisitos dados en la Ley de protección de datos personales y en la de habeas datas. Todos los pedidos son canalizados y entregados sin ningún inconveniente. Lo que se trato de evitar siempre es el mal uso de los informes de los organismos de control y evitar que haya gestores de negocios que utilicen los organismos de control para generar un negocio personal. Es decir, iniciar acciones contra los organismos sujetos a control como gestores de negocios. Protegemos al ciudadano y al Estado de todos los sectores que tratan de lucrar con este tipo de medidas.

¿Cómo es la relación con los organismos de control externo, en especial con la Auditoría General de la Nación (AGN)?

Cada informe que emitimos y una vez que llega a la máxima autoridad del organismo auditado, le trasladamos la información a la AGN. Incluso generamos una comisión de enlace con miembros de la SIGEN y AGN que se reúne cada vez que surge alguna inquietud sobre algún documento. Incorporamos también los informes de la AGN a nuestra base de datos lo cual nos sirve de sustento para mejorar el trabajo de control.

¿Siempre fue así la relación de cooperación con la AGN? 

Se firmó un convenio de cooperación en 1994. Y entre ese año y el 2003 no llegaron a quince los informes que se le trasladaron a la AGN. Esta nueva modalidad surgió a través de una propuesta nuestra junto a la Jefatura de Gabinete en 2010 cuando emitimos una resolución conjunta número 14 donde invitamos a la AGN a intercambiar información y a compartir una base de datos. Era básico poder contar todos con la información y tener un trabajo conjunto. Nos pasaba que por no haber relación, entraba en un área de gestión un equipo de SIGEN y otro de AGN para hacer el mismo trabajo. Con lo cual si esto no se programa lo que hace es entorpecer la gestión. Sabemos que cada uno tiene roles muy diferentes. Nosotros tenemos el control concomitante, estamos trabajando muy fuerte en el control preventivo para mejorar la gestión de gobierno. Mientras que ellos tienen un control posterior para analizar cómo se ejecutan las cuentas.

Según trascendió en los medios, una comisión de la Organización de Estados Americanos (OEA) señaló que la Sindicatura está alcanzando estándares internacionales en lo que es el control interno. ¿Qué puntos fueron los que destacaron?

Expusimos el estado de situación de la SIGEN. Cómo generamos distintos controles que no son sólo de auditoría. Hay controles mucho más amplios como el programa de fortalecimiento, controles con tablero de mando, etcétera. Además, destacaron que pudimos involucrar al organismo de control dentro del esquema de la gestión. En relación con esto, lanzamos distintos programas que tienen que ver con el fortalecimiento del control y la transparencia en la Argentina. Además de generar programas de fortalecimiento, hacemos un seguimiento muy exhaustivo. Esto es lo que llevó a ponderar nuestro trabajo por parte de la gente de la OEA.

Hace poco se llevó a cabo la reunión del Secretariado Permanente de Tribunales de Cuentas en Mar del Plata. ¿Cómo evalúa el desempeño de los organismos de control en el interior?

SIGEN preside la Red Federal de Control que está integrada por la totalidad de los órganos de control del país. Trabajamos con seis ministerios y todos los programas que tienen que ver con la inclusión social son controlados. A diferencia del control que hacen los Tribunales de Cuentas, acá se hace un control preventivo y concomitante. Desde la Sindicatura, tenemos todo sistematizado. Nosotros podemos hoy estar viendo qué tipo de controles se hace en cada punto del país. Hemos emitido manuales de control, y establecimos un acuerdo con distintas universidades del país. En el encuentro de Mar del Plata, se evaluó cómo están avanzando los programas anuales de trabajo. Por ejemplo, se puede ver el caso de un programa que no tenga observaciones y este muy lindo pero no cumple con el objetivo.

En líneas generales, ¿el balance es positivo?

Fue muy positivo porque hay cosas que no se muestran dentro de los programas, que es necesario mostrar. Por ejemplo, el programa Argentina Trabaja, no sólo lleva a enseñar un oficio a la persona. También que la incluye dentro del derecho primario que es el trabajo para que pueda a través de esa herramienta incluirse con en el sector privado. Fuera de su horario laborar se la está capacitando y se trabaja para que terminen su escolaridad.