La Organización Mundial del Trabajo presentó el informe Estimaciones mundiales de la OIT sobre los trabajadores y las trabajadoras migrantes. El documento indicó que los trabajadores migrantes en el mundo aumentaron un 3% (5 millones) entre 2017 y 2019, hasta llegar a los 169 millones de personas.

Según la investigación, la fuerza laboral migrante constituyó el 4,9% del mercado de trabajo en el mundo. La amplia mayoría de estos trabajadores (86,5%) estuvo compuesta por personas adultas entre 25 y 64 años. 

Por su parte, la proporción de jóvenes entre 15 y 24 años llegó al 10%. Si bien es un porcentaje menor, cada vez son más. El incremento de la migración juvenil –según la OIT- podría deberse a las elevadas tasas de desocupación en muchos países en desarrollo.

El 66,2% de los trabajadores migrantes se concentraron en el sector de los servicios, según el informe de la OIT.

Distribución en el mundo

En esta línea, el texto también desarrolló la distribución del total de los trabajadores migrantes en el mundo. Europa y Asia Central contuvieron al 37,7% de la mano de obra; por su parte, América al 35,6%; los Estados Árabes al 14,3%; Asia y el Pacífico, 14,2%; y por último África, con solo el 8,1%.

El organismo internacional añadió que del total estimado, 169 millones de trabajadores migrantes, 113,9 millones (67,4%) se movilizó a países de ingreso alto y, por su parte, 33 millones (19,5%) a países de ingreso mediano alto.

Desigualdad de género

Del total de trabajadores migrantes, el informe detalló que el 58,5% (99 millones) fueron hombres y las mujeres constituyeron el 41,5% (70 millones). Según la investigación, estas mujeres se enfrentaron con más obstáculos económicos y no económicos que los hombres. Además, vivieron situaciones de discriminación de género en el empleo, carecieron de conexiones sociales que les facilite conciliar la vida laboral y familiar en un país extranjero.

La OIT expuso estos factores como posibles motivos de reducción en la representación de las mujeres en la población de trabajadores migrantes.

Destino laboral de los migrantes

Otro dato del documento destacó que el 66,2% de los trabajadores migrantes se concentraron en el sector de los servicios, mientras que el 26,7% en la industria y el 7,1% restante en la agricultura. Es frecuente que esta mano de obra ocupe puestos de trabajo temporal, informal o carente de protección. El organismo internacional destacó que esto los ha expuesto a un riesgo aún mayor de inseguridad, despidos y deterioro de las condiciones de trabajo. 

Por otro lado, la organización con sede en Ginebra aclaró que el informe no cuenta con datos de los trabajadores migrantes durante la pandemia debido a que en muchos países no están disponibles todavía.

Pese a esto, el impacto del COVID-19 en trabajadoras migrantes parece haber agudizado vulnerabilidades ya existentes entre las mujeres, su presencia es mayor en ocupaciones mal pagadas, de baja calificación, y tienen un acceso limitado a los servicios asistenciales, además de menos opciones.