Es el crecimiento generalizado y continúo de los precios de los bienes y servicios de una economía. Cuando coexiste con una situación de recesión económica, se produce una combinación de inflación y estanflación lo cual tiene como producto el aumento simultáneo de la tasa de desempleo y la tasa inflacionaria.

Existen al menos tres tipos de inflación:

Inflación de Demanda: cuando la demanda general de bienes se incrementa, sin que el sector productivo haya tenido tiempo de adaptar la cantidad de bienes producidos a la demanda existente.

Inflación de Costos: cuando el costo de la mano de obra o las materias primas se encarece, y en un intento de mantener la tasa de beneficio los productores incrementan los precios.

Inflación Autoconstruida: ligada al hecho de que los agentes prevén aumentos futuros de precios y ajustan su conducta actual a esa previsión futura.