Publicado: 16-05-09

Polemica entre la auditoria, ONGs y el ejecutivo porteño : Para construir los túneles aliviadores del arroyo Maldonado se está haciendo un pozo a orillas del Río de la Plata cuya base, con las modificaciones actuales, llegaría hasta el acuífero Puelche uno de los más importantes del país, que atraviesa la Ciudad. La auditoría, grupos vecinales, ambientalistas y el INADI advierten sobre riesgos de contaminación.

Es la obra más importante de la gestión PRO y costará más de 209 millones de dólares (cotización 2007). La construcción de nuevos túneles aliviadores para evitar los desbordes del arroyo Maldonado y las interminables inundaciones que afectan a unas 266.500 personas en la Ciudad, ya generó una polémica impensada con vecinos, ambientalistas, legisladores, y ahora está siendo analizada por la Auditoría General porteña (AGCBA). El organismo alerta sobre una posible contaminación del acuífero Puelche, de 230 mil kilómetros cuadrados, que atraviesa de norte a sur la Ciudad, el norte bonaerense, sur santafesino y este de Córdoba.

Desde el Gobierno porteño niegan rotundamente que el cambio puntal del proyecto original (forma y profundidad del pozo, que ahora perforará el acuífero y costaría 14,6 millones de dólares más) contamine uno de los más importantes recursos hídricos.

Mientras el Gobierno porteño confirma que las partes de las dos máquinas Tunnel Boring Machine –que realizarán los dos túneles aliviadores: uno corto, de 4,6 km; otro largo, de 9,9 km– llegarán a la Aduana los primeros días del mes de junio, el conflicto ya está instalado. "Esta acción de amparo contra el Gobierno de la Ciudad solicita que se suspenda la ejecución del cambio y de la obra en sí, ya que cualquier modificación del proyecto original establecido por la Ley 1.660 (que autoriza y describe la financiación y gestión del programa de riesgo hídrico porteño) deberá ser remitido previamente a la Legislatura, y que cumpla con la Ley nacional Nº 25.688 (Régimen de gestión ambiental de aguas), previo a cualquier intervención sobre el acuífero Puelche".

Así comienza la medida cautelar solicitada el 6 de mayo por los legisladores Sergio Avrevaya y Facundo Martín Di Filippo (Coalición Cívica) y el ex legislador K Milciades Peña, un día después de la audiencia pública convocada por Graciela Gerola, titular de la Agencia de Protección Ambiental de la Ciudad, donde se informó a vecinos y ambientalistas sobre la modificación propuesta por la empresa contratista (Ghella). Este es el paso reglamentario, además, para solicitar la renovación del certificado ambiental de la obra, el cual venció el pasado 25 de abril.

Fuentes del Gobierno porteño aseguran que el contenido de esta polémica es "politiquería" y que quienes se quejan "no están de acuerdo con la obra en sí, no se trata de la contaminación o no del Puelche".

El cambio polémico. A modo de esclarecer tantas idas y vueltas, el subsecretario de Ingeniería y Obras Públicas de la Ciudad, Sergio Agostinelli, explicó que "no hay modificaciones de funcionamiento ni de traza. El único cambio que se propuso es la profundidad del pozo único de Punta Carrasco, boca de salida del Maldonado y por donde entrará la tuneladora. Descubrimos que peligraba la seguridad del Puelche y la de quienes trabajan ahí, por eso la empresa contratista (Ghella) propuso la ejecución de un pozo único circular –en vez de tres pegados en forma de trébol– que llegará a la misma profundidad (30 metros) sólo que sus cimientos alcanzarán los 54 metros, en las arcillas del Puelche, para tener una base más sólida. Estaremos monitoreando continuamente, antes, durante y después de finalizada la construcción de los túneles. La obra no contaminará nada".

Sin embargo, la Asociación Amigos del Lago del barrio de Palermo, junto a otros vecinos y el INADI, presentes en la audiencia, cuestionaron que la perforación del acuífero hará "peligrar la pureza del agua que consumen los partidos del Conurbano bonaerense".

María Lubertino, del INADI, afirmó que "los vecinos de los barrios atravesados por el Maldonado (Palermo, Villa Crespo, Villa Mitre, Villa Santa Rita y Vélez Sarsfield) son discriminados. Muchos consideran que la construcción de los túneles aliviadores debajo de la Av. Juan B. Justo no es la solución apropiada ya que enfrentará serios problemas de descarga por su gran longitud y el reflujo producido por el Río de la Plata con los vientos del Sudeste".

La directora de la auditoría porteña, Sandra Bergenfeld, adelantó en exclusiva a PERFIL, que dicho organismo está poniendo la lupa de sus especialistas sobre esta obra: "Ante la polémica que generó el método de entubamiento (resistido por ONGs y vecinos de la zona que tenían planes alternativos), la demora en el inicio de las obras, la ausencia o vencimiento de los estudios de impacto ambiental y las cuantiosas multas e intereses pagados por la Ciudad ante un crédito disponible y no ejecutado, iniciamos una investigación que aún debe pasar a descargo del ente auditado. Nuestro informe echará luz sobre temas conflictivos como la perforación del acuífero Puelche, los verdaderos alcances del impacto ambiental, la gestión de las obras y su avance. Por la seriedad y compromiso de la temática y hasta tanto no sea aprobado por el Colegio de Auditores, este estudio es confidencial", concluyó.

Qué opinan los expertos

"Tienen que demostrar que no hay impacto. Pero no hay dudas de que la intervención de un acuífero genera un potencial peligro de contaminación. Deberían cumplir con la Ley nacional 25.688 que legisla sobre la gestión ambiental de aguas", explicó el abogado Enrique Matías Viale, quien preside la Asociación Argentina de Abogados Ambientalistas. ¿Qué dice esta ley? Establece que "la utilización, conducción o desviación de aguas subterráneas deberán ser aprobadas, en el caso de cuencas interjurisdiccionales, por un comité que compongan las distintas áreas".

El director del área de Evaluación Técnica de la Agencia de Protección Ambiental porteña, Horacio Walter, afirmó que "esta modificación fue aprobada por el Banco Mundial.

Realizamos la audiencia pública para informar este cambio. La modificación es muy pequeña con respecto a la obra y tiene grandes ventajas: antes, proyectaban un pozo tricuerpo, ahora es único y circular, evitará el escurrimiento de líquidos del pozo al Puelche y viceversa, dará mayor espacio para equipos y trabajadores, mejor ventilación y posible reducción del plazo de obra".

Héctor Panarello, director del Instituto de Geocronología y Geología Isotópica del Conicet, dijo: "el Puelche ya tiene focos de contaminación con nitrato. Su agua la utilizan muchas personas del Conurbano bonaerense. Si el pozo está bien sellado y se monitorea, es posible que no haya filtraciones al Puelche y no perjudicaría al acuífero".