En la Legislatura porteña, representantes de Unión por la Patria y La Libertad Avanza presentaron un pedido de informes al Gobierno de la Ciudad por las obras y el cierre de estaciones en el subte D. A los trabajos que mantuvieron cerrada toda la línea desde enero hasta marzo, para la implementación de un nuevo sistema de señales, con el fin de mejorar la frecuencia y el funcionamiento, se le sumó la remodelación de la estación Facultad de Medicina.

El bloque de Unión por la Patria solicitó un informe en relación a la estación que se encuentra en el límite entre Balvanera y Recoleta, que recién volvió a estar habilitada el 1 de abril. Además, exigió que se detallen las razones de las constantes demoras y fallas denunciadas por los usuarios.

“Luego de su puesta en marcha, los usuarios del servicio reportan demoras que no existían previamente en el sistema y fallas en los carteles que comunican la frecuencia. También el subte comunicó demoras y suspensión de estaciones mediante canales oficiales de la concesionaria Emova y de SBASE (...)”, argumenta el documento realizado por UxP. 

En tanto, el bloque de La Libertad Avanza también presentó un pedido de informes en relación a las quejas de los usuarios por el deterioro en el funcionamiento. "(...) Desde el inicio de sus operaciones se han registrado numerosas quejas respecto a las demoras y mala operación del sistema recientemente instalado", expusieron. 

La Línea D es una de las seis que tiene la Ciudad de Buenos Aires. Une la estación Catedral, en el microcentro porteño, hasta la estación Congreso de Tucumán en el límite entre los barrios de Belgrano y Núñez.

Problemas de accesibilidad

Un informe realizado por la Fundación Rumbos sobre la pandemia, encontró que las personas con discapacidad tuvieron más dificultad en el uso del transporte público. En relación al subte, el informe halló que sólo un tercio de las estaciones cuentan con ascensor para viajar en ambas direcciones, y una gran porción no funciona.

En 2018 la justicia porteña había multado a Metrovías por no cumplir con una medida cautelar, que le ordenaba realizar una serie de obras para mejorar el acceso de las personas con discapacidad a las estaciones.

Sin avances en la ampliación de la red de subtes

La Ley 670 fue sancionada en noviembre de 2001 por la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires, y autorizaba al ejecutivo a construir tres nuevas líneas de subte: la F, de Barracas a Palermo; la G, de Retiro a Agronomía; y la I que conectaría Parque Chacabuco, Villa Crespo, Palermo, Retiro y/o Núñez. 

Desde la sanción de la Ley, hace más de 20 años, no hubo ningún avance en la materia.