Publicado: 14-03-09

Righi dice que no recortó poderes del fiscal garrido: El Procurador respondió las graves denuncias del funcionario que pegó el portazo.

El procurador general de la Nación, Esteban Righi, salió a defender la resolución 147 que motivó la renuncia del fiscal nacional de investigaciones administrativas (FIA), Manuel Garrido, quien el jueves dejó su cargo por sentirse "limitado en sus funciones". Righi le respondió con una negación: "Yo no le recorté ninguna atribución a Garrido. No sé por qué renunció".

Molesto por la dimensión pública que tomó la dimisión del ahora ex fiscal anticorrupción, Righi aclaró en el comienzo de la rueda de prensa que había decidido explicar los alcances de su resolución a los medios a pesar de que su política de "hablar por sus escritos" en lugar de hacerlo ante los periodistas. La firma de la 147 en noviembre pasado se debió –según el procurador– a un conflicto entre Garrido y el resto de los fiscales, particularmente con el fiscal de la Cámara Federal Germán Moldes, aunque no lo especificó. "No puede actuar en paralelo y en forma contradictoria con otro fiscal", se defendió Righi.

En su renuncia de 21 páginas, Garrido dijo que la resolución del procurador deja su gestión "al garete, condenando a la FIA a un rol casi instrascendente que no se condice con las capacidades con que se la dotó a costa de los contribuyentes".

Garrido ocupaba ese cargo hacía cinco años y desde su puesto impulsó acciones penales contra decenas de funcionarios de la presente gestión: investigó al matrimonio Kirchner por enriquecimiento ilícito, a la ex ministra de Economía Felisa Miceli por la bolsa con plata que encontraron en el baño de su despacho, denunció al INDEC por violación de secreto estadístico, y la lista sigue.

En la conferencia, Righi respondió punto por punto cada uno de los argumentos que usó Garrido para explicar por qué la resolución 147 limitaba sus funciones. El enojo del procurador se notó en sus palabras: "El texto de su renuncia es para un rechazo en la facultad. Ninguna persona razonable puede pensar como él".

La respuesta a la renuncia también incluyó un ataque. Righi dijo que durante su gestión dotó a la FIA de los medios necesarios para funcionar. "Tiene 80 empleados, 44 de los cuales los designó Garrido", detalló. "Además, su presupuesto es seis veces mayor al del resto de las fiscalías", atacó. El ahora ex fiscal dirigió la Oficina Anticorrupción y ganó por concurso el puesto en la fiscalía. Durante su gestión impulsó más de cien denuncias, una cifra que multiplicó la tarea de su predecesor.