Durante la última reunión del Colegio de Auditores de la Auditoría General de la Nación (AGN), Javier Fernández, presidente de la Comisión Administradora, puso a consideración de los demás auditores el proyecto para implementar el Manual de Estilo y Lenguaje Llano, por el cual se establecen pautas tipográficas, ortográficas y léxicas para que los documentos de la Institución presenten una imagen uniforme.

A tales efectos, el manual brinda lineamientos para que todos los contenidos se expresen de manera sencilla y transparente y está disponible para que lo utilicen todas las áreas del organismo.

En la misma línea, el Auditor General Estrada solicitó a la Comisión Administradora que se agregue un capítulo destinado a la puntuación. Los informes tienen una sobreabundancia de comas y puntuaciones mal colocadas, advirtió y aconsejó: El manual es bienvenido para mejorar nuestra redacción pero sería bueno que quienes trabajaron en él agreguen normas respecto a la puntuación.

En diálogo con Gestionpublica.info, el Auditor General Alejandro Nieva admitió que los informes que realiza la AGN se caracterizan por un gran rigor técnico. Las diferentes gerencias no contaban con un criterio unificado y eso puede generar, potencialmente, complejidad en su lectura y comprensión, aclaró.

El Manual de Estilo se aprobó ante la necesidad constante de que las auditorías puedan ser consultados por los ciudadanos, continuó Nieva y aclaró que la intención es que la institución tenga una imagen uniforme.

Por último, Nieva reconoció que la implementación del manual es muy importante. La finalidad es seguir profesionalizando la tarea de la AGN y hacer los informes más claros para acercarlos a la sociedad, concluyó.