En la última reunión de marzo, el Colegio de Auditores de la Auditoría General de la Nación (AGN) aprobó la Ejecución Presupuestaria correspondiente a la Cuenta de Inversión Ejercicio Fiscal 2015.

Durante el tratamiento del informe, la Auditora General Vilma Castillo destacó que la ejecución global del presupuesto correspondiente a la administración central al 31 de diciembre de 2015 fue del 95,4 %. En ese sentido, la contadora consideró que es un nivel de ejecución muy importante.

La cuenta de inversión 2015 muestra la decisión de un Gobierno de llevar adelante sus políticas y, en definitiva, llevar a cabo las decisiones que planificó el Congreso para el destino de los gastos, analizó Castillo y luego detalló que en materia de Servicios Sociales, la ejecución presupuestaria alcanzó el "97,8% de la ejecución. Dentro de esta área, el devengamiento para salud fue del 94,2 %; en educación del 94,7 %, para vivienda un 97,1 %, amplió.

En contrapartida, el Auditor General Jesús Rodríguez manifestó que en 2015 hubo una ampliación del presupuesto del 20% en relación al aprobado. Esto fue posible, entre otras cosas, por decretos que ampliaron las partidas en ese volumen. Pero los cambios no fueron homogéneos, lo que podría traer a colación que hubo algunos desvíos, explicó.

En esa línea, Rodríguez puntualizó que en el Ministerio de Ciencia se ejecutó menos de lo que estaba previsto inicialmente, mientras que en Prensa y Difusión la ejecución fue del doble a lo que aprobó el Congreso.

Estos cambios hicieron que por séptimo año consecutivo el presupuesto ofreciera un resultado deficitario, alertó el auditor radical y agregó que entre 2003 y 2015, las transferencias a los servicios sociales aumentaron un 1.600 %; mientras que las asignaciones vinculadas a los subsidios en el sector energético aumentaron un 46.000 %.

Por último, Rodríguez se refirió a las transferencias no automáticas y la inversión pública. En 2015, tres de cada cuatro pesos fueron girados a las provincias o municipios sin recurrir a las normas establecidas sino a criterios particulares y ocho de cada diez pesos destinados a inversión fueron gastados por el simple hecho que a algún funcionario le pareció bien, concluyó el auditor.

Alejandro Nieva se sumó a las manifestaciones de Rodríguez. El auditor, perteneciente también a la UCR, sentenció que aprobar la cuenta no significa aprobar la gestión 2015. Hay muchísimas observaciones y hay muchos informes que avalan estos comentarios. No se pasó de página por aprobar la cuenta y podemos seguir haciendo informes sobre cómo se han ejecutado las cuentas en las diferentes áreas, advirtió .