En junio de 2016, el jefe de Gobierno de la Ciudad deBuenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta, anunció que el Zoológico porteño se iba a transformar en un lugar de recreación para los chicos, en el que iban a poder aprender de forma interactiva, sin que haya animales en cautiverio.

La propuesta de hacer un Ecoparque, donde los animales exóticos no fuesen exhibidos y en donde las condiciones de cautiverio fueran mejoradas, fue acompañada por varias organizaciones civiles protectoras de animales. Inclusive,varias ONG enviaron proyectos de Ley propios a través de legisladores de distintos partidos.

En diciembre del año pasado fue aprobada en la legislatura porteña la norma que convierte al Zoo de Buenos Aires en un Ecoparque. Sin embargo, las organizaciones protectoras de animales han vuelto a reclamar porque los cambios realizados no se condicen con las primeras promesas de los funcionarios.

En diálogo con GestionPublica.info, el creador de uno de los proyectos de Ley, Andrei Chtcherbine, manifestó que el proyecto que se aprobó no modifica en nada la situación de los animales. Según contó, van a seguir siendo exhibidos, van a seguir llegando animales de otras partes y los traslados se están haciendo a otros zoológicos que están en peores condiciones que el de Palermo.

Para Chtcherbine, algunas cosas se copiaron de la iniciativa que presentamos nosotros.

Principalmente haber sacado al concesionario que tenía el control del parque desde la década de los 90´ y que no había hecho nada en materia de conservación, indicó y agregó que otra cosa que se empezó a hacer bien son algunos traslados a lugares más recomendables para el bienestar de los animales.

Por su parte, Malala Fontan, integrante de la ONG Sin Zoo, le manifestó a este medio que el proyecto que se aprobó no coincide con lo que se había anunciado en junio. Esta Ley permite trasladar animales de zoo a zoo a pesar de que dijeron que no querían que los animales sean exhibidos, sostuvo.

También está permitida la reproducción con fines de conservación, aunque no se especifica si es para animales autóctonos o para exóticos, con lo cual se mantienen las mismas funciones de un zoológico normal pero con un cambio de nombre, remarcó Fontan.

La ambientalista explicó que se intentó bajar la carga de animales desde mediados del año pasado. Comenzaron por sacar a los que pertenecen a Fauna Nación como la especie de los Coipos que los mandaron a una reserva en Moreno. Pero allí los animales lograron salir del predio nadando, llegaron a un asentamiento y los vecinos los asesinaron y los comieron, contó.