Durante el año pasado el Estado nacional entregó $ 16.460 millones en subsidios para el transporte automotor de pasajeros del país.

El monto abarca a casi la totalidad de los servicios que se prestan a lo largo y a lo ancho de la Argentina, a excepción del de larga distancia, que a principios de este mes estuvo paralizado por unos cinco días, en un conflicto que afectó a 450 mil personas y en el que se volvió a discutir, justamente, la política de subsidios llevada adelante por la Administración nacional.

La jurisdicción que más subsidios recibió en 2012 fue la provincia de Buenos Aires, con unos $ 5.512 millones, un 33% del total.

En segundo lugar aparece la Ciudad Autónoma de Buenos Aires con $ 1.267 millones, es decir, el 8% de las transferencias.

La provincia de Córdoba recibió el año pasado el 5% de los subsidios enviados por la Nación para el transporte de pasajeros, unos $ 828 millones.

Santa Fe, por su parte, obtuvo algo menos de transferencias. Fueron $ 676 millones, un monto que representó el 4% del total. En tanto que Mendoza recibió $ 481 millones, el 3% del total de subsidios de 2012.

Al resto de las provincias se enviaron unos $ 2.373 millones, el 14% del total de transferencias. Y a los llamados servicios nacionales de corta distancia, que es prestado por más de 130 empresas, llegaron $ 5.332 millones, lo que para el monto global de subsidios representa un 32%.

Esto quiere decir que dos de cada tres pesos destinados a ayudar al transporte automotor de pasajeros fueron para firmas de la provincia de Buenos Aires y a las líneas de servicios nacionales de corta distancia.

Cómo se usaron los subsidios

De los $ 16.460 millones que la Nación destinó a subsidiar al transporte automotor de pasajeros durante el año pasado, el 51% fue para “gastos en personal”. Se trató de $ 8.368 millones utilizados para el pago de sueldos de los empleados y las cargas sociales.

Al ítem “combustibles” le correspondieron $ 4.943 millones, un 30% del total de transferencias. Además, en el desagregado de los subsidios 2012 figura un 6% dividido entre “mantenimiento de unidades”, con $ 630 millones; “seguros”, $ 211 millones; e “impuestos y tasas”, $ 105 millones.

Todos estos montos corresponden a los Gastos Corrientes, una categoría del presupuesto que, en este caso, se completa con un ítem extra, llamado “otros gastos”, que representó un 6% del total de los subsidios, unos $ 1.050 millones.

Las cifras muestran que el 93% de las transferencias fueron utilizadas para Gastos Corrientes, y sólo el 7% restante a Gastos en Capital. Y si de subsidios al transporte automotor se trata, esta última clase de erogaciones correspondieron al ítem “renovación de unidades”, que ascendió a $ 1.154 millones.

Lo que viene

Si se toma solamente el primer bimestre de 2013, la Nación ya destinó unos $ 2.452 millones para subsidiar a todos los servicios de pasajeros del país, salvo -como ya se dijo- al de larga distancia nacional.

Partiendo de esta cifra como referencia, la proyección de subsidios para todo el año ascendería a $ 14.712 millones; es decir $ 1.748 millones menos que en 2012 y, en términos porcentuales, un 11% por debajo del total de transferencias del mismo ejercicio.

En función del año pasado, ente enero y febrero de 2013 las ayudas económicas al transporte de pasajeros repiten casi las mismas proporciones para cada jurisdicción.

Es que de los $ 2.453 millones que ya se transfirieron, $ 813 millones fueron para la provincia de Buenos Aires (33,1%); Capital Federal recibió $ 184 millones (7,5%); Córdoba $ 126 millones (5,1%); Santa Fe $ 105 millones (4,2%); Mendoza $ 78 millones (3,1%); el resto de las jurisdicciones obtuvieron $ 367 millones (14,9%); y a los servicios nacionales de corta distancia llegaron unos $ 780 millones, es decir, el 31,8%.