Tras la deleznable y repudiable ola de violencia y delincuencia producida la semana pasada en catorce provincias, en el marco de la protesta policial por mejoras salariales, una señal de alarma se enciende para distintos Estados de cara al año 2014. 

Es que si los aumentos acordados con las fuerzas de seguridad se extendieran a otros sectores, como Salud y Educación, las provincias podrían verse obligadas a desembolsar hasta $ 100.000 millones más durante el próximo ejercicio, sólo en concepto de remuneraciones.

Acuartelamientos, el impacto directo

Salvo en Salta, donde el Gobierno local estableció un techo de $ 6.500 mensuales de sueldo para su policía (en rigor, el más bajo del país), los aumentos generalizados de las fuerzas de seguridad llevaron las remuneraciones a montos que van desde los 8 mil y 9 mil pesos en provincias del norte, hasta un rango de entre 10 mil y 12 mil pesos en las jurisdicciones que están al sur del Río Colorado.

En ese sentido, y según datos de la consultora Economía y Regiones -comandada por el economista Luis Rappoport-, el año que viene las distintas provincias deberán desembolsar unos $ 330 millones por cada punto porcentual de aumento otorgado a sus policías.

Esto implica que, en función los incrementos promedio verificados, que oscilan entre el 30% y el 60% según la provincia, el impacto directo para los presupuestos 2014 estaría en el orden de los $ 10.000 a los casi $ 20.000 millones adicionales en para el conjunto de las jurisdicciones afectadas.

Impacto indirecto

Ahora bien, si se produjera un “efecto contagio”, es decir, si las discusiones salariales se extendieran a otros sectores de las administraciones públicas, como Salud y Educación (situación que, por cierto, ya se está comenzando a registrar en algunas jurisdicciones), los presupuestos provinciales se verían sometidos durante 2014 a una presión mucho mayor a la vivida en este diciembre de 2013, que quintuplicaría los valores adicionales señalados, llevándolos a un rango de entre $ 50.000 y $ 100.000 millones anuales, según los aumentos a los que se arribe en cada región.

Así, una escalada general de incrementos salariales impactaría de lleno en provincias que destinan, en promedio, hasta un 55% de sus gastos totales sólo en el pago de remuneraciones al personal estatal. 

Los saqueos en números 

Provincias donde hubo acuartelamientos policiales: 14

Muertos durante los saqueos: 12

Comercios afectados: 1.900 según la Corporación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).

Pérdidas: unos $ 570 millones contando los daños sufridos por supermercados medianos y grandes, almacenes, kioscos, colchonerías, pinturerías, concesionarias de automóviles y motos, farmacias, mueblerías y locales de electrodomésticos, entre otros rubros. 

Este último cálculo no incluye las pérdidas por lucro cesante, generadas por la paralización de actividades, el reacondicionamiento de instalaciones, el reabastecimiento de mercadería, ni los daños a comerciantes y empleados.

Jurisdicciones más afectadas: 

Córdoba: pérdidas más de 1.100 establecimientos por unos $ 313 millones (el 55% del total registrado en todo el país).

Tucumán: 250 locales afectados y pérdidas materiales por $ 74 millones. 

Entre Ríos: hubo 200 comercios afectados y las pérdidas se calculan en casi $ 60 millones.