Publicado: 23-08-2010
 
Para los concejales del Frente Progresista fue muy importante que la legislatura local apruebe, por unanimidad, la propuesta que habilita los mecanismos para efectuar una auditoría externa en áreas sensibles. 

Rafaela.- A la oposición le costó imponer su proyecto para instalar auditores externos en el corazón del Gobierno municipal, pero finalmente lograron ese objetivo.

A este triunfo político llegaron con la colaboración involuntaria de las continuas irregularidades que brotaron, con fuerza, en distintas áreas de la gestión y minaron las defensas del oficialismo. De todos modos, los ediles del Frente Progresista que impulsaron el proyecto auditor no eligen confrontar sino subrayar la importancia que tendrá una profunda revisión de los procesos administrativos de la Municipalidad para impulsar mejoras en el funcionamiento y en las herramientas de control.

"Esta auditoría externa debe, preferentemente, analizar integralmente la manera en que se están haciendo las cosas y después, a través de sus informes, sugerir mejoras para la administración pública de Rafaela.

Pretendemos que la gestión mejore su calidad y se actualice si es necesario", expresó el concejal frentista, Atilio Pignoni.

Y para Luis Peretti, también edil del Frente Progresista, la aprobación del proyecto para analizar la salud de la administración local efectuada en la última sesión del Concejo Municipal no registra antecedentes.

"Es histórico que en la Municipalidad se haga una auditoría externa que no sólo es para investigar sino especialmente para prevenir casos de malversación de fondos. Actualmente existen sumarios donde hay fuertes sospechas de manejos incorrectos del dinero público", resaltó.

El decano de los legisladores municipales fue el miembro informante durante el encuentro del Concejo y, en ese ámbito, recordó que su vocación de control no es nueva pues ya en 1993 había propuesto la creación de un Tribunal de Cuentas para el Municipio. "En aquella oportunidad quedó en el tintero porque montar una estructura de ese tipo requiere un presupuesto considerable por la cantidad de profesionales que deben incorporarse", agregó.

De todos modos, Peretti no ocultó su satisfacción porque "después de tanto insistir con la necesidad de realizar una auditoría externa en la Municipalidad, hemos logrado que el oficialismo nos apoye". Y precisó que "en un primer momento el trabajo se enfocará en las áreas más conflictivas donde, evidentemente, el sistema parece estar fallando", en referencia al Departamento de Control Público. Es en esta dependencia donde actualmente más de una docena de sumarios están en plena ejecución: "No puede ser que cada inspector rinda cuando quiera el dinero que recauda por distintos servicios que brinda el Municipio", se quejó.

"Nunca el gobierno de Rafaela aceptó ser investigado o auditado, por eso esta decisión tiene un carácter histórico", afirmó Pignoni, quien también optó por dimensionar esta decisión desde una perspectiva temporal. Sin intención de polemizar, rescató el "espíritu constructivo" de la auditoría porque "los problemas de Control Público ya se descubrieron y están en la instancia de los sumarios, ahora el desafío es avanzar en muchos ámbitos de la esfera municipal para mejorar procedimientos y controles a partir del aporte de profesionales externos".

Asimismo, aseveró que "en un listado de áreas para revisar además de Control Público puede estar la forma en que se registran las horas extras, el uso del combustible y otros insumos de la gestión". En este sentido, indicó que "por ejemplo, estamos esperando que el Ejecutivo responda a un pedido sobre el sistema administrativo del Relleno Sanitario, es decir los residuos recuperados se venden, se cobran y luego el Municipio distribuye esos ingresos entre las cooperativas participantes, nosotros queremos los detalles de ese circuito".

En tanto, Peretti admitió que una labor de esta magnitud "puede generar un costo al tesoro público, pero cualquier proyecto de mejora de gestión puede ser una inversión positiva en el mediano y largo plazo".

Al respecto, agregó que en un Municipio donde el presupuesto anual ronda los 150 millones de pesos existen las posibilidades para financiar una auditoría que, a partir de las mejoras que recomiende, permita optimizar la gestión y ahorrar dinero.

"Cuántos más controles existan, mejor funcionará el sistema de gestión.

No estamos echando un manto de sospechas sobre nadie, esto lo queremos dejar en claro. Simplemente buscamos que esta administración mejore cualitativamente a partir de una mirada externa de especialistas", concluyó Pignoni.