Publicado: 26-03-2010
 
Las viviendas de hasta 70 m2 cubiertos tendrían un aumento de $ 3,41 por bimestre. En cambio -en el otro extremo de la escala- las casas de hasta 900 m2 deberían pagar $ 60,35 más por factura.

Santa Fe.- El Enress propuso al Poder Ejecutivo un esquema de actualización tarifaria diferente del que impulsó la empresa Aguas Santafesinas SA y de los que hasta ahora se han aplicado en la concesión. 

El Ente Regulador de los Servicios Sanitarios -tal como había adelantado El Litoral- impulsa aumentos diferentes según el nivel económico de los usuarios: toma para construir una escala la superficie cubierta de los inmuebles y aplica diferentes subsidios según el tamaño de cada casa. 

Los ejemplos promedio informados por el Enress indican que a los usuarios de viviendas de hasta 70 metros cuadrados (m2), el aumento será de $ 3,41 por bimestre. Hasta 110 m2, $ 11,88; hasta 200 m2, $ 25,57, y hasta 900m2, el aumento de $ 60,35. 

La propuesta de incremento de precios presentada por Assa mantenía un sistema de subsidio estatal a todos los usuarios de esa empresa (que sólo cubre 15 distritos en la provincia), sin considerar su condición socioeconómica real ni sus niveles de consumo. 

En cambio, el Enress propuso "un sistema de subsidio estatal diferente al vigente: que el mismo sea progresivo y de modo que el aumento efectivo sobre la tarifa de los usuarios del servicio no sea superior a los valores establecidos" en un cuadro que crea una nueva escala entre los usuarios residenciales. 

La resolución del Enress no se sale de los límites que en materia de regulaciones tarifarias le impone la ley 11.220 (que privatizó la Dipos, en 1994), pero cambia la lógica de su aplicación: redirecciona los subsidios estatales de manera de alcanzar sólo a una parte de los usuarios de agua potable y cloacas. 

El nuevo esquema -aún falta el visto bueno del Poder Ejecutivo- aumenta sobre todo las tarifas de las viviendas más grandes y de los comercios e industrias (que siguen sin tener categorías específicas, como las de la EPE). Una modificación de este tipo requeriría cambiar la legislación. 

Antecedentes 

"La empresa Aguas Santafesinas SA efectuó una presentación solicitando la revisión de la tarifa de los servicios sanitarios de agua potable y desagües cloacales -que presta en quince distritos de la Provincia de Santa Fe- ante el Ministerio de Aguas Servicios Públicos y Medio Ambiente (Maspyma)", recuerda un parte de prensa del Enress. 

"Cabe señalar que el Maspyma es la autoridad de aplicación, es quien tiene la última palabra sobre el incremento tarifario solicitado por Assa, previo dictamen del Ente Regulador de Servicios Sanitarios (Enress)", sigue el texto. 

El ente de control "elaboró la resolución 0345, con fecha 22 de marzo, en la cual destaca en sus considerandos la importancia la realización de las Audiencia Pública llevadas a cabo en las ciudades de Santa Fe y Rosario, donde la opinión de los distintos actores involucrados fueron contempladas en esta resolución". 

Medidor de eficiencia 

La enorme mayoría de los usuarios de Assa no tiene medidor de caudal de agua domiciliario. El ítem "micromedición cobertura del 100 % del área concesionada en el año 10 de la concesión" es uno de los tantos incumplimientos contractuales de la operación diseñada en los ’90, abortada en 2006, tras su evidente fracaso. 

La resolución del Enress busca avanzar -en algo al menos- para subsanar esa falencia, señalada reiteradamente durante las exposiciones de las audiencias públicas sobre la tarifa de Aguas, celebradas en Santa Fe y Rosario. 

Los expositores que representaron a los usuarios, tanto desde las entidades intermedias organizadas con ese propósito como desde otros ámbitos de participación política, se ve a los caudalímetros como una suerte de medidores de eficiencia, que permitirían saber cuántos metros de agua se producen, cuántos llegan a los hogares y cuántos se pierden en las redes. Los aparatos tienen la virtud de limitar el consumo hogareño desmedido, el derroche, porque se paga por lo efectivamente utilizado. Las cooperativas de agua potable incluyen a los caudalímetros cada vez que suman usuarios al servicio. 

Plan de 10 años 

El Enress le recomienda a Assa "reformular parcialmente el plan de obras previsto para el corriente año, incorporando un plan de micromedición que prevea la instalación en los lugares de mayor consumo de la cantidad de dispositivos que sea necesaria para alcanzar un total de 100.000 medidores instalados en todo el ámbito de su prestación", dice un parte de prensa del Ente de Control. 

Agrega una recomendación: presentar en un plazo de 6 meses "un proyecto integral de micromedición de Mediano y Largo plazo, que contemple las obras y acciones, incluso complementarias, que sean necesarias para alcanzar, en un período de 10 años, un porcentaje de cobertura equivalente, como mínimo, al 75 % de las conexiones existentes a su vencimiento".