Publicado: 14-12-08

Intereses políticos complican la tarea

Realizar el control sobre la gestión de gobierno no resulta una tarea sencilla. A los intereses político-partidarios que, con frecuencia, se cruzan y provocan demoras en las investigaciones, se suma el problema de la falta de predisposición de algunos organismos para brindar la información que solicita la Auditoría General de la Nación (AGN).

"Durante este año la actividad fue fructífera: los informes sobre Aerolíneas, pesca, el caso Greco y sobre la Anses así lo demuestran -indicó a LA NACION Leandro Despouy (UCR), presidente de la AGN-. Sin embargo, hay que destacar las dificultades que enfrentamos para la obtención de información en áreas clave, como el Occovi [que en lugar de suministrarla pidió el currículum de los auditores] y la AFIP, en el caso de Aerolíneas."

Hay demoras en algunos informes, y así lo indica un relevamiento que realizó la Asociación del Personal de Organismos de Control (APOC). Allí se mencionan, por ejemplo, que un informe sobre estados contables de 2003 del Ferrocarril General Belgrano tardó 363 días en ser aprobada, mientras que dos informes sobre Líneas Aéreas Federales (Lafsa) demoraron 246 y 181 días, respectivamente.

El presidente de APOC, Hugo Quintana, insiste en la necesidad de mejorar y jerarquizar los mecanismos de control. "El control está en relación directa con la calidad de vida de la gente", destacó Quintana, que lamenta que los informes tengan tan bajo nivel de receptividad en los organismos oficiales.

"Los informes repiten las mismas recomendaciones año tras año, ya que los responsables no toman las medidas correctivas correspondientes. Las dependencias auditadas instrumentan menos del 25% de las recomendaciones que se le señalan", dijo Quintana, para quien el poder político "no debería cooptar las tareas de control".