La Constitución de la República de Ecuador de 2008 establece la creación del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS) como una entidad autónoma, que forma parte de la Función de Transparencia y Control Social. Nació con el objetivo de ser el quinto poder, tras el ejecutivo, legislativo, judicial y la función electoral, también establecida en la norma suprema de la República ecuatoriana. 

El CPCSS se dedica a promover el ejercicio de los derechos de participación ciudadana y el control público, la lucha contra la corrupción y la promoción de la transparencia. De esta manera, la premisa que guía el trabajo del Consejo es impulsar el empoderamiento ciudadano, la inclusión y la intervención activa de los ecuatorianos para lograr una verdadera democracia participativa.

Según Andes, la agencia pública de noticias de Ecuador y Sudamérica, “el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social trabajó durante 2013 en el fortalecimiento del sistema democrático participativo e incluyente de los ciudadanos a través de la promoción de los derechos de participación, veedurías ciudadanas y desconcentración institucional en las 24 provincias del país”, sostuvo Fernando Cedeño, presidente de la Andes.

Sin embargo, el consejero David Rosero indicó que es necesario llevar a cabo estadísticas que demuestren los hechos realizados. “Pese a los esfuerzos institucionales por avanzar la participación ciudadana en los procesos de toma de decisiones de los gobiernos seccionales, aún falta conocer si cumplieron con el mandato constitucional”, señaló.

A su vez, “falta dar a conocer indicadores de cuántas asambleas ciudadanas se realizaron, cuántos procesos de veedurías se efectuaron y cuántos observatorios se crearon”, explicó Rosero.

Del mismo modo, Marcela Miranda, consejera de CPCCS sostuvo: “La rendición de cuentas de las autoridades debe fomentar que los ciudadanos participen, intervengan, pregunten qué se hizo con los recursos públicos”.