¿Para qué sirve la licencia de conducir digital?
A tres años de su implementación, aún surgen dudas sobre su uso y muchos conductores terminan abonando multas al ser rechazadas en los controles viales.
La posibilidad de ya no tener que salir de casa con dinero en efectivo ni con documentos personales porque todo está cargado en un teléfono celular es sumamente atractiva. Si bien esa pareciera ser la meta, aún hay comprobantes físicos necesarios y no tenerlos encima puede generar costos impensados. Es el caso de la licencia de conducir digital que rige en el país desde principios de 2019 y, sin embargo, aún no es aceptada en los controles de tránsito si no es acompañada por el carnet tradicional.
Desde la Agencia Nacional de Seguridad Vial advierten que "es necesario llevar la licencia en formato físico en todos los casos".
Si bien pasaron tres años, la confusión sigue vigente y muchos conductores son penalizados con abultadas multas por confiarse en que solo presentando la licencia de conducir digital pueden sortear las fiscalizaciones. El artículo 40 de la Ley Nacional de Tránsito 24.449 estipula que resulta obligatorio contar con licencia de conducir habilitante, cédula de identificación automotor y constancia de seguro obligatorio automotor vigente. Mientras que una disposición de 2019 de la Agencia Nacional de Seguridad Vial dispone que la licencia nacional de conducir en formato digital es “complementaria” a la física. Por lo tanto, aseguran que es necesario "llevar la licencia en formato físico en todos los casos".
Una multa por no presentar la licencia de conducir en formato físico en la Ciudad de Buenos Aires tiene un valor equivalente a 50 UF. Cada Unidad Fija cuesta hoy $123,40 por lo que, en caso de ser sancionado por la infracción, hay que desembolsar $6.179. Y la confusión no es sólo porteña sino que las dudas se replican en todas las provincias y las faltas se acumulan en todo el país.
De los comprobantes que son requeridos en cada operativo vial, sólo se admite en formato digital la póliza actualizada del seguro ya que tanto la licencia de conducir habilitante como la cédula de identificación de vehículos deben ser exhibidas en formato físico, mientras que la oblea de la verificación técnica vehicular suele estar adherida en el vidrio frontal del automóvil.
¿Qué función cumple la licencia digital?
Para poder acceder a la licencia de conducir digital es necesario descargar la aplicación Mi Argentina. La licencia digital tiene el mismo aspecto e información que la credencial física y los datos son actualizados en tiempo real. Al escanear el código QR que aparece en la licencia se verifica el estado de la credencial.
La presentación de la licencia digital sirve para agilizar los tiempos en los controles rápidos que se realizan sobre todo en eventos multitudinarios.
La presentación de la licencia digital sirve para agilizar los tiempos en los controles rápidos que se realizan sobre todo en eventos multitudinarios. En esos casos, los agentes proceden a pedir documentación y si se presenta la licencia digital mediante el código QR ya aparecen todos los datos del conductor lo que facilita la verificación. En este tipo de operativos, muchas veces sólo con mostrar la licencia digital es suficiente aunque no hay que confiarse porque en caso de ser requerido el soporte físico es imperioso tenerlo.
Las licencias de conducir digitales se controlan mediante la misma aplicación móvil que los fiscalizadores de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, las Fuerzas de Seguridad Nacional y los organismos provinciales y/o municipales utilizan para corroborar los carné físicos.
Errores de comunicación
Las dudas y confusiones de los conductores son producto de la ambigüedad con la que fue presentada la licencia digital. Aún hoy en el sitio oficial se puede leer "en Mi Argentina vas a encontrar todos los papeles de tu vehículo en versión digital, con la misma validez que los físicos, para circular por todo el país. Además, vas a acceder a la información de radicación de dominio de tu vehículo".
Si bien en otras páginas oficiales se aclara que una no reemplaza a la otra sino que son complementarias, el error de comunicación puede representar un costo muy alto para los ciudadanos que, confiados en esa información, salen a conducir sus vehículos sólo con la descarga de la app en sus teléfonos.