El nuevo ministro de Ambiente y Desarrollo Sustentable, Sergio Bergman, junto a la Oficina Anticorrupción (OA) impulsaron una auditoria general en el organismo que controla y monitorea la calidad del agua y el aire en la cuenca del río Matanza-Riachuelo (ACUMAR). Según informaron desde Ambiente, "hay grandes desvíos de fondos que requieren una revisión, además de detectarse que no existe una correlación entre los fondos asignados y las obras realizadas.”.

El 20 de enero pasado se publicó la vuelta de la Autoridad de Cuenca Matanza-Riachuelo (ACUMAR) al Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable retomando la configuración original del organismo, que había sido modificado en 2013 vía decreto. El mismo está compuesto por ocho integrantes, entre ellos el titular del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable, quien será el presidente, junto a tres representantes del Poder Ejecutivo nacional, dos representantes de la Provincia de Buenos Aires y dos representantes de la Ciudad de Buenos Aires.

ACUMAR dependía de la jefatura de Gabinete, a cargo de Aníbal Fernández hasta el 10 de diciembre. Desde el Ministerio contactaron a la OA por su capacidad de auditoría y para "para constatar si los desvíos se dieron por negligencia o corrupción", señalaron a la prensa desde el Ministerio, además resaltaron que “la prioridad central" de Bergman será el saneamiento de la cuenca y la relocalización de las familias que aún residen en la ribera”.

En octubre, la justicia federal le ordenó a ACUMAR el diseño y presentación de un nuevo plan de saneamiento para el Riachuelo. En dicha ocasión, y al no haber avances significativos, los jueces reclamaron más control a las industrias que arrojan sus desechos, como también auditorías de los planes de reconversión de las empresas.

El pasado 28 de enero fue el primer encuentro con el nuevo Consejo Directivo de ACUMAR que contó con la presencia del ministro de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación, Sergio Bergman, Sergio Federovisky, Julio Torti e Iván Kerr (todos representantes por la Nación); Miguel Saredi y Martín Renom (ambos representantes por la Provincia de Buenos Aires) y Alberto Términe y María Fernanda Reyes (representantes por la Ciudad de Buenos Aires).

Del encuentro participaron también el presidente ejecutivo de ACUMAR, el arquitecto Amilcar López, y la vicepresidente ejecutiva, Gabriela Seijo; el ministro de Gobierno de la Ciudad de Buenos, Bruno Screnci y Roberto Gigante, ministro de Coordinación y Gestión Pública.

“Poner en funcionamiento al Consejo Directivo de la ACUMAR es un paso fundamental para poner en marcha la gestión del organismo tendiente a la limpieza del Riachuelo, que es una de las políticas prioritarias para el Estado Nacional”, dijo el ministro Bergman, quien, a su vez, es el presidente de la ACUMAR.&nbspEl 4 de febrero comenzaran las actividades oficiales del Consejo Directivo cuando tenga lugar la primera reunión oficial del organismo.