YoVeoVeo es una app de Ecuador disponible para Android o web y permite al ciudadano denunciar problemas de la administración sin tanta burocracia, con solo una foto y una breve descripción, es un canal directo de comunicación entre el gobierno y los ciudadanos.

En Colombia surgió Mapee, una plataforma web que también funciona con fotografías: el ciudadano sube imágenes y geolocaliza las diferentes propagandas de partidos políticos generando un mapa colaborativo de la publicidad política. Funciona como un mecanismo de control para comprobar que las campañas cumplen con los topes máximos impuestos.

Bigov es otro desarrollo web que ayuda a las entidades locales en el diseño de políticas de mejora para sus ciudadanos y entorno empresarial. Además ofrece la información necesaria para saber si una ciudad es considerada inteligente.

Por su parte, en Argentina, Poder Ciudadano y Pol-It desarrollaron una app para incentivar a los ciudadanos a ejercer el papel de observador electoral durante los comicios. Ojo con el voto pretende evitar los fraudes electorales y realiza reportes como falta de boletas o problemas con las autoridades de mesas.

En Chile existe Partidos Públicos, un desarrollo de la Fundación Ciudadano Inteligente. Esta plataforma web sirve para transparentar la actividad política y es considerada una plataforma inédita donde encontrar la información más relevante de los partidos políticos. Surgió hace tres años como una manera de abrir los partidos públicos y democratizar su información a través de la transparencia, expresó Manuel Barros, coordinador de proyectos de la Fundación en comunicación con este medio. Partimos de la idea de transparencia democratizadora, y pensamos a los partidos políticos como una de las instituciones menos abiertas, con más poder y menos transparente, enfatizó.

La plataforma se desarrolló gracias al Fondo de las Naciones Unidas para la Democracia. Esta experiencia, al principio funcionaba a voluntad de los partidos, pero desde la aprobación de la nueva Ley de Partidos Políticos que estableció la obligación de transparentar la gestión, esta plataforma desarrolló un mecanismo en el que se toma la información de la página oficial, extrae los datos, los procesa, los aloja en una base y los visualiza. La gran diferencia que tiene con otra plataforma de la región, es que presenta la información de manera muy amigable, muy intuitiva, agregada por semestre, o desagregada por meses, permite la comparación y la búsqueda de registros. Es una plataforma muy potente en cuanto a la publicación y apertura de datos, explicó Barros.

Entre las novedades que se aproximan desde la Fundación trabajan para sumar a esta plataforma una línea de género para promover la equidad de género entre los partidos y visibilizar la importancia que tiene que las mujeres comiencen a tomar lugares de poder. Una gran deuda de esta nueva ley es el tema de género. No existe información sobre el sesgo de género que hay en los espacios de poder o políticos y queremos avanzar en esta línea, agregó Barros, quien también expresó el interés de llevar esta plataforma a otros países.

Arrels es una aplicación que facilita la asistencia a personas sin hogar en Barcelona gracias a la participación ciudadana. Esta aplicación ayuda a construir una radiografía de las personas en situación de calle. Otra herramienta digital es Hackity App, que sirve para gestionar el espacio público informando de incidencias de su entorno y aportando ideas para solventarlo. El vecino puede subir una foto acompañada de una descripción del problema y desde la plataforma se promueve el aporte de ideas para resolverlo. Luego la propuesta más votada será comunicada a la administración pública.

La Agenda de Comunicación, de España, es una agenda de contactos para Android abierta a la comunidad. Este desarrollo resultó muy útil para periodistas españoles y extranjeros ya que está toda la información disponible de las instituciones públicas, la prensa nacional, partidos políticos, embajadas y otras entidades. Otra iniciativa española es Cityzn, que busca fomentar el bienestar común y facilitar el consenso. Permite realizar presupuestos participativos, propuestas ciudadanas, declaración de incidencias y aportar soluciones basadas en las dinámicas de co-creación vecinal.

El móvil es lo primero que tenemos en la mano y lo primero que tocamos a cada minuto de nuestras vidas. Observamos que nuestras ciudades están cada vez más llenas de personas que van por la calle mirando el celular en vez de a la gente que se cruzan, dejando de lado esas relaciones reales, personales y a la comunidad en la que viven. Por eso, decidimos crear una aplicación para que los ciudadanos pudieran usar la tecnología con el fin de abrir a la participación en la comunidad en la que viven. Somos los habitantes quienes vivimos las ciudades, sentimos las falencias y vemos las cosas que se pueden mejorar, entonces queríamos desarrollar una herramienta que permitiera activar a la ciudadanía para que pudieran aportar algo a esa ciudad, expresó María Rodríguez, coordinadora de comunicación de Cityzn, en comunicación con Gestionpublica.info.

La idea es intentar construir entre todos la ciudad en la que queremos vivir. Y esto en colaboración con la administración pública, con el gobierno local, remarcó. Esta aplicación está disponible en España, Argentina, México y Estados Unidos.

Pese a la proliferación de apps para la participación ciudadana, el éxito de las mismas depende del compromiso ciudadano y de los gobiernos. Nos encontramos con dificultades a la hora de implantar esto. Porque para empezar, a los ciudadanos en España nos falta camino para terminar de activarnos y dedicarle tiempo a cosas que no nos afectan de forma directa, remarcó Rodríguez. Ahora se encuentran desarrollando Welever, una red de colaboración ciudadana.

La falta de apertura de los organismos estatales, locales o municipales, la reticencia por parte de los partidos políticos, la escases de recursos económicos para el desarrollo de estas herramientas y la poca actividad o participación ciudadana, son los problemas que más se mencionan. Pensamos que transparentando la información y obligando a los partidos abrirse y transparentarse íbamos a lograr apoyo por parte de la población, y esto no sucedió, explicó Barros desde Chile.

También encontramos dificultades para implantarlo en los ayuntamientos. A la hora de hacer una inversión en esta aplicación los trámites son muy lentos. Al día de hoy, solo hay 5 municipios pequeños dados de alta en la aplicación, pero no vemos un uso efectivo de la misma, remarcó Rodríguez desde Madrid.

El gran problema de este tipo de iniciativa, es que no va a tener éxito la relación entre los partidos políticos o las instituciones estatales con la sociedad civil. Hay un ánimo de poca colaboración y desconfianza y en la medida de que esto no cambie, este tipo de iniciativas van a ser solo eso: iniciativas de la sociedad civil, finalizó Barros.