En veintiún días, y sin pasar por el Congreso de la Nación, el Poder Ejecutivo autorizó ampliar los gastos totales del presupuesto 2013 en casi $ 100 mil millones. 

Es que para afrontar los compromisos económicos del último mes del año, el flamante Jefe de Gabinete de Ministros debutó en el cargo permitiendo un incremento en las partidas de $ 18.967 millones

Esa modificación, la vigésimo octava del ejercicio, es la primera Decisión Administrativa que tomó el funcionario entrante y fue dispuesta el 28 de noviembre. La medida se sumó al Decreto de Necesidad y Urgencia -firmado tres semanas antes, el 7 del mismo mes-, que ya había aumentado los fondos disponibles en la cifra récord de $ 80.735 millones.

Así, y hablando de récords, noviembre quedará marcado en la historia presupuestaria como el mes en el que se autorizaron ampliaciones de gastos por un total de $ 99.702 millones

La Decisión del Jefe de Gabinete, que lleva el número 1/2013 (ver: Otra curiosidad), constó de 53 planillas en las que se detalló cómo se redistribuyeron los nuevos fondos en los diferentes ministerios. 

De los casi $ 19 mil millones extra, el 80% es financiado con recursos corrientes por $ 15.303 millones. En gran medida, la cifra proviene de una mayor recaudación de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES).            

Los destinos y el déficit 

Con la última modificación presupuestaria se equiparó una situación que había quedado en evidencia luego del DNU del 7 noviembre, firmado por el vicepresidente a cargo del Ejecutivo durante la licencia de la Presidenta. 

Es que, en aquella oportunidad, la finalidad más beneficiada con la ampliación de gastos fue la de Servicios Económicos, priorizando incrementos relacionados a los subsidios para energía, transporte y combustibles.  

En cambio, la Decisión Administrativa en cuestión apunta en mayor medida a los Servicios Sociales. Tanto es así, que una de las partidas que más se amplió es la que el propio ANSES destina a las Asignaciones Familiares de los trabajadores del sector público y privado, y al pago de la Asignación Universal por Hijo, por un total de $ 5.298 millones. Asimismo, se incrementaron los fondos para el PAMI en $ 1.734 millones.

Por el lado de los Ministerios, el de Desarrollo Social vio incrementar sus recursos en $ 6.795 millones con los que se cubrirán las Pensiones No Contributivas. Salud, por su parte, dispone de $ 210 millones más para la atención médica de los pensionados

Complementariamente, también se inyectaron nuevos fondos a la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) y a las Cajas Previsionales de los Militares, el Servicio Penitenciario, la Prefectura y la Policía Federal.

El Poder Judicial, en tanto, sumó a su presupuesto $ 1.451 millones destinados, sobre todo, al funcionamiento de la Corte Suprema y el Consejo de la Magistratura. Pero también se registra un incremento para distintas reparticiones de justicia del país.

Todos estos cambios presupuestarios, 28 en total, contando Decisiones Administrativas y Decretos de Necesidad y Urgencia, impactaron de lleno en el resultado financiero -la diferencia entre la recaudación y los gastos del Estado- calculado a principio de año. 

Es que ya en ese entonces se advertía que el ejercicio cerraría con un déficit fiscal de $ 412 millones. Sin embargo, las modificaciones registradas en estos meses provocaron que, al 28 de noviembre, el rojo previsto alcance los $ 109.453 millones, es decir, unas 265 veces más que lo calculado cuando se aprobó la Ley de Presupuesto 2013.

Números globales

Así, los Gastos Totales de la Administración Nacional pasaron de los $ 628.629 millones iniciales a los $ 778.544 millones vigentes, un 24% por encima de lo estimado a comienzos del año.

Esta diferencia, de $ 149.915 millones, es financiada principalmente con fondos de otros organismos -lo que se conoce como deuda intra sector público-, con reservas del Banco Central y con mayor emisión monetaria.

Además, no sólo los gastos fueron modificados. También se incrementaron los recursos estimados, aunque en menor medida. En números, los ingresos pasaron de los $ 628.217 millones originales a los $ 669.091 millones vigentes, es decir unos $ 40.874 millones de más, que representan un 7% por encima de lo previsto. 

Otra curiosidad

Al margen de todo esto, la medida inaugural tomada por el nuevo Jefe de Gabinete encierra un dato de color: según el procedimiento administrativo vigente, con la primera Decisión Administrativa que dicta el funcionario entrante, debe reiniciarse la numeración de las disposiciones.

Esto quiere decir que el ejercicio 2013 cerrará con dos normas coexistentes que llevan el mismo número, el 1/2013. 

La primera, que data del 10 de enero, fue dictada por el entonces Jefe de Gabinete y sirvió nada menos que para distribuir el Presupuesto de Gastos y Recursos de la Administración Nacional, que había sido aprobado a fines de 2012. El mismo que fue modificado 28 veces en once meses sin consultar al Poder Legislativo.