Publicado: 27-08-2011 
  
INFORME DE LA AGN

La Auditoría General de la Nación (AGN), el órgano de contralor del sector público en manos del Congreso, declaró el fracaso del programa oficial para reducir el consumo de gas en hogares.

A través del informe 94/2011, publicado en junio, el organismo denunció que el Programa de Uso Racional de la Energía (PURE), que otorga premios y castigos a los usuarios en función de cómo haya variado su consumo de gas, no logró disminuir la demanda domiciliaria del fluido. Es más, cuestionó que entre 2005 y 2008 (se evaluó hasta 2009) los requerimientos de los hogares alcanzados por la iniciativa aumentaron, por lo que no se logró ahorrar energía. "En 2006, la demanda de los usuarios se incrementó en 85 millones de metros cúbicos (MMm3) y en 2007 creció en otros 110 MMm3", advirtió la AGN, presidida por el radical Leandro Despouy.

La fragilidad de la industria del gas natural puso en aprietos al Gobierno en los últimos meses. Durante el invierno, las restricciones al abastecimiento industrial afectaron el suministro de las 300 empresas –metalúrgicas, alimenticias, petroquímicas– más importantes del país. A eso se sumó la cifra millonaria –más de $ 10 mil millones– que gastará el Estado en 2011 para importar el hidrocarburo, una situación que compromete cada vez más el superávit comercial.

El informe criticó la falta de transparencia con la que se aplicó el PURE, creado en 2004 por la Secretaría de Energía y del Enargas, dado que las distribuidoras de gas –el sector el liderado por Metrogas, Gas BAN y Camuzzie, entre otras– no publicaron esquemas claros acerca de cómo se cobran las penalidades. Y denunció la ineficiencia del programa, argumentando que no se logró direccionar los cargos recaudados hacia el Fondo Fiduciario creado para atender inversiones en materia de transporte y distribución de gas.

"Se generaron fondos ociosos porque no se asignó (a nuevos proyectos) todo lo recaudado en concepto de cargos por excedente. El Enargas no controló los valores depositados para el Fideicomiso de Gas I y II", alertó la AGN.

Desde el Gobierno optaron por restarle veracidad al diagnóstico. Si bien evitó realizar una interpretación política y se amparó en su condición de técnica, Marta Zaghini, responsable de la Secretaría de Energía del Pronuree, programa que apunta a lograr la eficiencia energética, indicó a PERFIL que "no comparte las conclusiones del informe de la AGN" y resaltó que "en los últimos tiempos la mayoría de los informes que publica el organismo van en contra del Gobierno". Aún así, tras su presentación en un evento realizado ayer en el Centro Argentino de Ingenieros (CAI), admitió que "desde un punto de vista técnico, algunas observaciones del estudio son correctas y otras son erróneas". Pero se excusó de analizar en detalle cada punto del informe. "Eso le corresponde al secretario de Energía (Daniel Cameron)", eludió.

La AGN también condena el carácter regresivo del PURE, ya que los usuarios de mayor consumo de gas –los de mejor nivel socioeconómico– terminaran pagando menos, en promedio, que los de menos recursos. "La implementación del PURE genera inequidades entre los distintos usuarios residenciales por la metodología establecida para el cálculo del cargo adicional y por la falta de modificación del período de referencia (el consumo de 2003)", indicó.