El alto índice de mortalidad derivado de los siniestros viales producidos en la provincia son motivo de preocupación para el defensor del Pueblo de Jujuy, Javier De Bedia, que no obstante destacó las acciones de prevención y concientización puestas en práctica por el Ministerio de Seguridad, al tiempo que se comprometió a sumar acciones desde la Defensoría, para bajar esos índices.
Así el funcionario se hizo eco de un  informe elaborado por el equipo técnico de la Secretaría de Seguridad  Vial, dependiente de ese Ministerio,  que reveló que el año pasado la cantidad de peatones muertos por siniestros viales fue un 24% menor respecto a las estadísticas del 2015.
 Al respecto, el Ombudsman provincial valoró la tarea que viene desarrollando el Ministerio de Seguridad de la provincia para bajar los índices de siniestralidad de peatones en  Jujuy pero a la vez exhortó a los  automovilistas en general tener “un  mayor apego” a las normas viales, en  la comprensión de que “respetar las  reglas de tránsito es respetar la vida y  permite garantizar una mayor seguridad vial”, sostuvo.
 Ajustándose a los datos de la Organización Mundial de la Salud  (OMS), que revelan que anualmente  fallecen 1,24 millones de personas  en siniestros viales, de los cuales el  22% son peatones, De Bedia dijo que  “un dato para tener en cuenta y para  analizar en profundidad” es lo que se  advierte a nivel macro con este tema,  “para de esa manera entender los sucesos que se producen a diario en la  provincia”.
 Si bien resaltó la “notable mejora  que se evidenció en materia de seguridad vial en Jujuy” en el último año,  siempre conforme al informe oficial  que llegó a sus manos, no dejó de  alertar que los siniestros viales continúan causando un importante número de víctimas entre conductores y  fundamentalmente entre peatones.
 Citando las estadísticas oficiales  aportadas por Observatorio Vial Provincial, el Defensor refirió que la tarea de prevención iniciada por las actuales autoridades competentes en el  tema dieron resultados positivos ya  que en el año 2016 se redujo el índice  de peatones muertos un 24%, es decir fallecieron un total de 26 personas, cuando en 2015 esa cifra había  llegado a 34 víctimas.
 Para De Bedia es fundamental aumentar los esfuerzos para reducir el  número de casos graves o mortales  de siniestralidad vial, e insistir en las  campañas de prevención dirigidas a  escolares, sobre todo dentro de los  propios establecimientos educativos  de nivel primario y secundario.
 Por último, en su encuentro con la  prensa el Ombudsman remarcó que  “la seguridad vial es una construcción social que la hacemos entre todos” y que en ella “tienen responsabilidades compartidas los conductores, peatones y quienes tienen la  responsabilidad de diseñar e implementar un sistema de tránsito vial  que tenga en cuenta las necesidades  y limitaciones de todos sus actores”.