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Publicado: 23-08-2012

Misiones.- Por un Pacto Fiscal, de la masa coparticipable quedaba a la Seguridad Social 15%. Algunos gobernadores reclaman recuperar esos fondos.

Algunas provincias están intensificando el reclamo para que se deje de derivar el 15 por ciento de la masa coparticipable a la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses).

El Pacto Fiscal de 1992 estableció que las provincias dejaban de percibir el citado porcentaje de los recursos para financiar a la Anses, que en ese momento atravesaba una crítica situación y contaba con escasos recursos para hacer frente al pago de haberes.

Ahora se plantea que algunas provincias sustentan el reclamo porque esa disposición dejó de tener sustento cuando se eliminó el régimen de capitalización.

Sin embargo, la situación financiera de la Anses, “es tan precaria que devolver esos recursos a las provincias le implicaría entrar nuevamente en déficit operativo. La solución no pasa por mantener la situación y seguir degradando el federalismo sino en replantear la política previsional y cumplir con el mandato constitucional de acordar una nueva ley de coparticipación federal”, según un informe realizado por la consultora Idesa.

Sostiene que la Anses perdería 400 millones de pesos mensuales sin el 15 por ciento de la coparticipación que las provincias ceden desde 1992. El debate se produce en momentos en que el presupuesto de la Anses cada año crece más y casi iguala al Fondo de Garantía de Sustentabilidad, según sostiene otro informe.
 

El acuerdo

En 1992, el Estado nacional y las provincias firmaron un Pacto Fiscal por el cual se acordó, entre otros aspectos, detraer el 15% de la masa coparticipable para dirigirla a la Anses. La finalidad era financiar la crisis del sistema previsional de aquel momento y la transición hacia el sistema mixto, es decir combinación de capitalización y reparto, que se aprobó ese mismo año.

A finales del 2008, el régimen de capitalización fue eliminado y la Anses se apropió de los fondos acumulados en las AFJP y el flujo de los aportes personales.

Sin embargo, aunque la razón que legitimaba la detracción del 15 por ciento de la masa coparticipable desapareció, que era generar el régimen de capitalización, la detracción a las provincias se mantuvo. Para ello se contó con la anuencia de la mayoría de los legisladores provinciales, observó la consultora la consultora Idesa.

“Lamentablemente, el oscurantismo que impera en el sistema estadístico nacional dificulta medir con precisión los efectos financieros derivados de esta decisión”.

La Consultora sostiene con datos oficiales del Ministerio de Economía que se puede aproximar la relevancia que este 15 por ciento de la masa coparticipable tiene en las relaciones fiscales entre la Nación y las provincias.

Según esta fuente oficial se observa que en el 1° semestre del año 2012: Los ingresos del sistema previsional nacional fueron de 21 mil millones de pesos promedio mensual y las prestaciones previsionales abonadas 19,6 mil millones de pesos de promedio mensual, o sea, hubo un excedente previsional de 1,4 mil millones de pesos por mes. En el mismo período, los recursos provenientes del 15 por ciento de la masa coparticipable que corresponden a las provincias fueron 1,8 mil millones de pesos por mes. Esto significa que, sin la detracción del 15% de la masa coparticipable a las provincias, la Anses entraría en un déficit de unos 400 millones de pesos por mes, sostiene el informe.
 

La situación actual

“Esta información oficial pone en evidencia que el reclamo de algunas provincias por la devolución de este 15 por ciento de la masa coparticipable colisiona con un sistema previsional en estado de insolvencia”.

Si las provincias recuperaran esta fuente de financiamiento, en consonancia con el régimen federal, la Anses entraría nuevamente en déficit operativo. De allí que el conflicto entre la Nación y las provincias sea de muy difícil resolución.
También se sostiene en el informe que “la necesidad de mantener la apropiación desnuda el manejo oportunista del sistema previsional”.

 El testimonio más elocuente son las moratorias previsionales con las que se otorgaron indiscriminadamente, es decir, sin consideraciones sobre el nivel de ingreso de los solicitantes, con más 2,6 millones de jubilaciones sin aportes.


Fondo de Garantía de Sustentabilidad

El Fondo de Garantía de Sustentabilidad (FGS), compuesto por diversos tipos de herramientas financieras, como los títulos públicos, las acciones de empresas, fue constituido para garantizar el pago de las jubilaciones y pensiones en casos de contingencias.

En 2009 podía sostenerse el sistema previsional con dos tercios del FGS. Pero con el tiempo, y la rentabilidad de las inversiones realizadas, esa relación se modificó. En tres años, el Fondo se incrementó un 42%, mientras que la partida de la Administración subió el 71% y, a marzo de 2012, estaban casi empatados en $ 200.000 millones.  Semanas atrás, El Auditor.info había detectado que las inversiones realizadas con el FGS rendían menos que la inflación oficial, y que el propio organismo que dispone de ese dinero, la Anses, reconocía que los dividendos que vendrían de esas apuestas caerían casi $ 1.000 millones este año.

El FGS, que nació con la idea de atenuar el impacto de una posible evolución negativa de la economía sobre el sistema jubilatorio, se transformó en la herramienta a la que apela el Estado nacional para sostener iniciativas como la Asignación Universal por Hijo, el plan Conectar Igualdad y el reciente Procrear, de construcción de viviendas. Pero los números no sólo indican que el crecimiento del Fondo es cada vez menor, sino que además hay partidas que evolucionan de forma inversamente proporcional, casi al punto de quedar empatadas. Es el caso del presupuesto de la Anses, sostiene el mismo informe.

En 2009, cuando se eliminó el régimen de jubilaciones privadas, la masa de dinero de las AFJP pasó al Fondo de Garantía de Sustentabilidad, que creció exponencialmente hasta alcanzar los $ 140.853 millones. Por aquellos días, el presupuesto de la Anses era de $ 93.094 millones. Pero ahora, el Fondo a marzo de este año totaliza unos $ 209.103 millones y el presupuesto de la Anses, es de $ 199.335 millones. O sea que ambos montos están casi empatados en $ 200 mil millones y la proporción alcanza el 95%.