Publicado: 09/12/2014

Afirmamos que nuestros pueblos necesitan de estados activos y eficientes dotados de herramientas adecuadas para erradicar en forma definitiva la corrupción que conlleva a la prostergación, la inequidad y la pobreza.

Sostenemos que cuanto mas eficiente es la labor de nuestros trabajadores mejor es la calidad institucional de los servicios públicos, mejorando asi la gobernanza y sustentabilidad de nuestra democracia.

En nuestro país como en muchos países del mundo la corrupción - tanto la publica como la privada - causa graves perjuicios al desarrollo sostenible y constituye una enfermedad que destruye progresivamente la confianza en las instituciones y en la misma democracia, socavando la calidad y eficiencia del estado, afectando servicios básicos e inclusive la vida de los ciudadanos.

En momentos donde las tradicionales recetas liberales recesivas reclaman a nivel global ajustes, privatizaciones y reducción de puestos de trabajo, no se advierte que mediante una mayor transparencia y atacando las practicas corruptas, los estados podrían gestionar en forma mas eficiente, equilibrando sus déficit a través de un gasto mas eficaz y transparente.

Nosotros decimos que la corrupción mata y que el pretendido ajuste lo haga la corrupción reduciendo sobnecostos que afectan las finanzas del estado.

La misión de nuestros trabajadores es servir al interés público alertando y advirtiendo en tiempo y forma los eventuales desvíos para recomendar acciones correctivas en la administración pública favoreciendo la transparencia y eficiencia en la gestión de las políticas publicas contribuyendo a las metas nacionales tales como la recaudación de ingresos con equidad, la protección de la comunidad, la aplicación de la Justicia y la protección de la seguridad nacional en la lucha contra el narcotráfico.

La administración moderna reclama de instituciones autónomas e independientes, pero la tarea la ejercen los trabajadores siendo el primer eslabón mas vulnerable en la lucha contra la corrupción sufriendo la penosa practica de "matar al mensajero". Somos los sindicatos entonces los que tomamos el desafió de defender esta independencia y rechazar el acoso que sufren nuestros trabajadores para que la lucha contra la corrupción sea debidamente ejercida, en condiciones dignas de trabajo.

Nuestros afiliados se enfrentan a diario ante la contradicción de cumplir con sus obligaciones y por ello poner en peligro su puesto de trabajo e incluso sus propias vidas enfrentándose a quienes pretenden callar y disciplinar a nuestros trabajadores. No actuar firmemente ante ei acoso o violación a un solo trabajador es suficiente para pretender disciplinar al resto de ios trabajadores para evitar que se cumpla con el deber institucional de alertar y controlar la corrupción.

Si se pretende realmente luchar contra la corrupción es esencial que nuestros trabajadores así como sus representantes sindicales gocen de suficiente protección laboral e independencia. Entonces no solo se beneficiaran nuestros afiliados a través de un trabajo digno sino fundamentalmente la sociedad en su conjunto fortaleciendo las mismas instituciones, las políticas publicas y los servicios públicos de calidad.

Por estos motivos y para visualizar y valorizar la labor de nuestros trabajadores hemos constituido la RED de TRABAJADORES de Control Publico, Justicia, Fiscalización y Recaudación de la República Argentina, unidos con el fin de contribuir a la lucha contra la corrupción, la evasión, el narcotráfico, el contrabando, mejorar la gobernanza y potenciar los derechos laborales y sindicales de nuestros afiliados.

Hugo Buisel Quintana
Julio Piumato
Jorge Burgos