La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) presentó el documento “Transparencia Fiscal en América Latina 2022”, el cual muestra los recientes avances de la región en la lucha contra la evasión fiscal y otros delitos financieros a través de la transparencia y el intercambio de información (EOI) con fines fiscales.

Según la CEPAL, en el año 2018 se dejaron de recaudar 272.000 millones de euros, lo que equivale al 6.1% del PBI de la región. 

De acuerdo al documento, la evasión fiscal y otras formas de flujos financieros Ilícitos son un problema global que obstaculiza la gestión del riesgo de desastres, debilita la credibilidad del sistema fiscal y supone una importante pérdida de ingresos para los gobiernos. Para la OCDE, los países en desarrollo se ven especialmente afectados ya que estos flujos privan a las naciones de fondos cruciales para llevar a cabo sus programas de crecimiento y desarrollo. 

“A medida que los gobiernos planifican sus respectivos planes de recuperación económica tras la pandemia, la necesidad de atajar la evasión fiscal y otras formas de flujos financieros ilícitos es cada vez más acuciante”, explica el texto.

¿Cuánto dinero se pierde por la evasión fiscal? Según la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) en el año 2018 se dejaron de recaudar 272.000 millones de euros, lo que equivale al 6.1% del producto interior bruto de la región. De esa cifra, el 3.8% corresponde a la evasión del impuesto de sociedades y del impuesto sobre la renta de las personas físicas.

El nivel de tasa de evasión tributaria en el impuesto sobre la renta de las personas físicas en el país se ubica dentro de la media con 49.9%. 

En el documento se asegura que el país con mayor tasa de evasión tributaria en el impuesto sobre la renta de las personas físicas es Guatemala rondando el 69.9%. También este país lidera la tabla de evasión tributaria para el impuesto de sociedades con el 79.9%. Los porcentajes de Argentina se ubican dentro de la media con 49.9% y 49.7%, respectivamente.

Por otro lado, Argentina cuenta con una estrategia para el uso de la información intercambiada bajo tratados para fines no fiscales, que se ha utilizado en la práctica. El documento da cuenta de un caso de 2017 donde la AFIP recibió un intercambio espontáneo de información de una jurisdicción asociada informando que habían detectado una empresa realizando movimientos financieros por un monto superior a 1.000.000 de euros. Con esta información la entidad realizó una auditoría a la empresa  para verificar el ingreso de los fondos. 

Más allá de las cifras negativas, la OCDE destacó que ya hay 14 países latinoamericanos que son parte de la convención multilateral sobre Asistencia Administrativa Mutua en Materia Fiscal. También hay 10 países latinoamericanos que participan en el intercambio automático de información de cuentas financieras (AEOI). A través de éstos y por las investigaciones offshore, se lograron identificar al menos 25.000 millones de euros de ingresos adicionales (impuestos, intereses y sanciones) en la región desde 2009.