El Sistema de Administración de Documentos Electrónicos (SADE) está vigente en la Ciudad de Buenos Aires desde junio de 2009, cuando se aprobó su implementación con el objetivo de digitalizar todos los trámites y comunicaciones del Poder Ejecutivo porteño. A partir de allí, la Auditoría local comenzó un reclamo para poder acceder irrestrictamente a los expedientes a fin de cumplir su tarea de controlar al sector público. En septiembre de 2017 se consiguió la visualización de la información con algunas condiciones.

Una nota del El Auditor, publicada en junio de 2017, exponía las misivas que se enviaban el Gobierno de la Ciudad con el organismo de control a fin de solucionar este conflicto. Oportunamente, Cecilia Segura, la presidenta de la Auditoría General de la Ciudad de Buenos Aires (AGCBA), le dijo a Gestiónpública.info que "el SADE es un candado más a la información".

Hasta aquel momento, la última novedad era una nota que la AGCBA le había enviado en dos oportunidades al Jefe de Gabinete local, Felipe Miguel, sin respuesta. En ella se pedía "el acceso de forma irrestricta, a modo consulta, a los módulos que conforman el Ecosistema SADE”.

A partir de septiembre de 2017 se implementó un nuevo procedimiento de auditoría de documentos.

Tiempo después, el conflicto tuvo una solución, a medias. A fines de septiembre de 2017, se "indicó la Dirección General de Sistemas de la Información que disponga los mecanismos necesarios para la implementación del nuevo procedimiento de auditoría de documentos".

Con él, “los usuarios ‘Auditores Externos’ tienen acceso a los expedientes electrónicos dentro del Ecosistema SADE".

Pero, para que esto suceda hay que atravesar varios pasos. Primero, el trabajo de auditoría debe estar aprobado por el organismo de control. Luego, la repartición del GCBA involucrada debe estar notificada tanto del informe a realizarse como del equipo que va a participar.

Para que ellos sean dados de alta en el Ecosistema, "la cartera auditada enviará una comunicación a la Administración Central del SADE con nombre, apellido, CUIT y mail de cada integrante; nombre y período de auditoría y la nota original que dio origen al trabajo". Cumplido este paso, dicha Administración da de alta al proceso.

En cualquier momento se puede deshabilitar el acceso a los expedientes electrónicos.

Según la nota recibida por la Auditoría porteña, enviada por la Secretaría de Legal y Técnica, "la AGCBA va a poder pedirle al auditado inspeccionar expedientes particulares". Cuando eso suceda, "la repartición porteña le comunicará a la Administración central para que los ponga a disposición del cuerpo de auditores". 

Es importante destacar que entre las condiciones está que "en cualquier momento del proceso se podrán deshabilitar auditorías completas, usuarios auditores o expedientes relacionados con el proceso".