La Federación Argentina de Cartoneros, Carreros y Recicladores (FACcyR), junto con otras organizaciones ambientales y cooperativas, presentaron el proyecto de ley de Presupuestos Mínimos de Gestión Ambiental de Envases y Promoción del Reciclaje Inclusivo. El documento fue entregado a los diputados nacionales Máximo Kirchner y Federico Fagioli. 

La iniciativa impulsa una mayor responsabilidad a los productores y propone que se agregue una tasa a quienes introduzcan envases en el mercado, premiando a quienes lo hagan con materiales reciclables y que, justamente, sean fáciles de reutilizar. Al mismo tiempo, contempla que esa tasa no impacte en el precio final del producto en más de un 3%. 

El proyecto fue presentado junto con un análisis estadístico que lo respalda. En Argentina se producen 50 mil toneladas de residuos por día, lo que representa 1,15 kilogramos por persona. La mitad termina en basurales a cielo abierto o en algún relleno sanitario y de ello solo se recupera un 10% y el 20% de los residuos sólidos urbanos son envases post consumo. 

Piden más responsabilidad empresarial

En el programa “Un Día Más”, que se emite por Radio SI, Jonatan Castillo, reciclador urbano y miembro de FACyR, se refirió al proyecto que presentaron ante los diputados y reveló cómo es el trabajo que hacen con los materiales que encuentran en las calles. 

Las multinacionales se tienen que hacer cargo de los envases en la post venta. Cualquier tipo de envase, una latita o un cartón, tiene que gestionarse de una manera ecológica o bien deben brindar las herramientas necesarias para quienes procesan luego esos materiales”, explicó Castillo en torno al proyecto de Ley. 

En ese sentido, Castillo reveló que “los cartoneros ya hacemos el trabajo de reciclado de esos materiales de manera gratuita. Una vez que sale del mercado sin valor económico, nadie se hace cargo de ese envase".

El referente de los cartoneros señaló que buscan que el proyecto sea apoyado por el Estado. "Tenemos experiencia y vemos como algunos compañeros en el interior la pelean mucho más que nosotros. En la Ciudad hay competencia para vender los materiales”, analizó y concluyó: “Desde un guante, un carro, una cinta. A nadie le gusta meter la mano en la basura y sacarla sucia”.