El Tribunal de Cuentas de la Provincia de Córdoba (TCP) continúa con un proyecto integral de modernización que abarca todas sus áreas. Los primeros avances se vieron en 2020 cuando se implementó la firma digital para los funcionarios. El Auditor.info dialogó con la presidenta del organismo, Andrea Abramo, sobre el proceso que atraviesa la institución. 

- Cuando llegó la pandemia, ¿qué nivel de modernización tenía el Tribunal?

Parte de la modernización fue poder adaptarnos y la verdad es que nadie conocía lo que es vivir una pandemia. Estudiamos, elaboramos protocolos y lo más difícil fue acostumbrarnos a estos hábitos y reglas de trabajo, las cuales no había manera de no cumplirlas. Como el Tribunal de Cuentas no era el organismo más moderno, vamos hacia eso, no podíamos hacer 100% de teletrabajo, más allá de todas las acciones realizadas para que en los lugares donde fuera factible se hiciera. Con lo cual, el cambio de hábito fue brutal pero pudimos adaptarnos bien, ni siquiera tuvimos brotes dentro del organismo, algunos casos aislados pero por fuera. 

- ¿Fue la pandemia el disparador del proyecto de modernización?

No. Desde que asumimos era una decisión tomada. Uno de nuestros principales objetivos era modernizar integralmente el Tribunal y ese plan nunca se vio modificado por la pandemia. Inclusive, hoy podemos decir que la primera etapa está cumplida desde el punto de vista que para nosotros modernizar no es solamente utilizar tecnología de punta, sino aggiornarlo a todos los procesos. Desde el día uno empezamos a relevar y conocer a detalle todos los procesos que involucran al Tribunal de Cuentas, proponiendo las mejoras y la ingeniería correcta. Ahora estamos en la etapa de desarrollo pero conociendo lo que queremos, lo cual no es menor.

"Uno de nuestros objetivos es modernizar íntegramente al Tribunal"

- A la par de la modernización siempre está la capacitación, ¿tuvieron algún inconveniente a la hora de implementar el nuevo sistema?

Siempre decimos que hay pilares fundamentales en este proyecto de modernización. Por un lado, necesitas conocer los procesos, porque sino no hay herramienta que te ayude a cumplir el objetivo final que es hacer tu tarea de una forma más eficiente. Y esto tiene que venir acompañado de capacitaciones. De esta manera lográs, no solo que se conozcan las nuevas formas de trabajar sino que además integrás a todo el personal a las nuevas maneras de realizar sus tareas. 

Como todavía el proyecto está en desarrollo, seguramente las principales complicaciones no las hemos visto. Tenemos opiniones sobre qué es bueno y qué es malo pero creo que esto lo veremos a partir de la implementación, prevista para mitad de año. 

- ¿Cuál es el fin último del nuevo sistema?

Poder cumplir, en tiempo y forma, con todas las obligaciones que tiene el Tribunal de Cuentas y, humildemente, poder sumar otras propuestas de mejoras al gobierno en general. Contar con bases de datos integradas y controles automáticos, uno está en condiciones de poder ver otras situaciones y proponer mejoras integralmente. 

- Hay casos en los que el nivel de modernización del organismo de control no es igual al del gobierno ¿Cómo es la situación en Córdoba?

El gobierno está mucho más avanzado que el Tribunal pero tiene otro sistema. Está previsto que el que estamos desarrollando cumpla con la ley de modernización, lo que hace a la interoperabilidad entre sistemas, y de esta manera podamos tener acceso a la información del gobierno para poder cumplir mejor con el control que tenemos que hacer. No vamos a tener inconvenientes, por eso estoy convencida que vamos a poder hacerlo de la mejor manera y a avanzar en la calidad. Y este es el camino al expediente digital, para cumplirlo de punta a punta.