Después de 19 años de la promulgación de la Ley Nº 25.674 de Cupo Social Femenino, la Confederación General del Trabajo (CGT) decidió incorporarla en la próxima elección de representantes que se realizará el 11 de noviembre. La inclusión de más mujeres en los sindicatos tiene como objetivo buscar una mayor legitimidad y equidad en las organizaciones. 

Carla Pitiot, directora del Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE) y dirigente sindical de Asociación del Personal de los Organismos de Control (APOC), aseguró que hay una necesidad de democratizar el modelo gremial. Además, respaldó que se incluyan nuevas prácticas dirigenciales en los sindicatos y que sean igualitarias dentro de la perspectiva social de género.

"Las mujeres sindicalistas que formamos parte de la CGT queremos que nuestra voz sea escuchada", señaló Carla Pitiot.

“Estamos a las puertas de un Congreso de la CGT. Esto es muy positivo, las mujeres sindicalistas que formamos parte de la Confederación General del Trabajo queremos ser incluidas en esta discusión. Que nuestra voz sea escuchada teniendo en cuenta que el sindicalismo y movimiento de mujeres no sólo es una conjunción potente y positiva sino que sea visibilizado como Justicia. Hay participación y militancia sindical femenina y una ausencia de reconocimiento de estas prácticas en la distribución de cargos altos de decisión”, señaló la dirigente de APOC.

Dirigentes de la CGT destacaron la inclusión del cupo femenino en las próximas elecciones de conducción. “Es una asignatura pendiente que tiene el movimiento obrero a nivel CGT”, afirmó Héctor Daer, titular de la agrupación. Por otro lado, el secretario general Carlos Acuña sostuvo que hay "poca vocación de mujeres para liderar sindicatos", pero expresó que se comprometía a fomentar la participación.

En 2010, el 5% de los cargos en secretarías generales eran ocupados por mujeres. El año pasado, sólo el 3%. 

Dentro de los cargos sindicales, la participación femenina abarca bajo mínimo porcentaje en puestos altos. Las secretarias generales en 2010 representaban el 5% y en 2020, el 3%. La única mujer que ocupa un cargo directivo en la central obrera es Noé Ruiz (Modelos), a cargo de la Secretaría de Género e Igualdad de Oportunidades. “Hay temas que, histórica o culturalmente, no estaban en la esfera de las mujeres, por ejemplo una banca pública, finanzas o economía. Si compartimos estos puestos de una manera sinérgica, se pueden acortar las diferencias”, acentuó Carla Pitiot. 

A su vez, la referente de APOC afirmó que en los temas de género siempre hay avances y retrocesos. “Es muy fácil retroceder en estas temáticas. Hay un camino de lucha, de mucho recorrido y de repente, en un segundo, se retrocede con facilidad. Hay que ver cómo se sostiene en el tiempo. Estas cosas se logran con la normativa pero después se tienen que controlar y sostener”, agregó.

Faltan mujeres en puestos de poder

Según el informe “Sexo y poder” del Equipo Latinoamericano de Género y Justicia (ELA), solamente el 11% de los cargos de decisión están ocupados por mujeres. La Ley Nº 25.674 (sancionada en noviembre de 2002) establece un cupo de al menos 30% de representación femenina en los cargos electivos y representativos de asociaciones sindicales. La norma aún no ha logrado una mayor presencia de mujeres en las dirigencias, a más de 19 años de su sanción. 

Asimismo, el informe señaló que en los últimos 10 años los cargos ocupados por mujeres aún son la minoría: en las confederaciones pasó del 14% al 13%, en las federaciones, de un 5% a un 2% y en los sindicatos, de un 5% a un 3%. Además, las mujeres ocupan solo el 21% de los cargos jerárquicos en agrupaciones.

"Estamos ante una situación muy lejana a la paridad", sostuvo la socióloga Gisela Dohm.

Gisela Dohm, socióloga e integrante de áreas políticas en ELA, sostuvo que el ámbito sindical aún sigue siendo muy restrictivo para la participación de mujeres en espacios de representación. “Estamos ante una situación muy lejana a la paridad, incluso al cupo que estableció la Ley 25.674 hace casi 19 años”, añadió.

“Dentro de las organizaciones sindicales aún se establecen los modelos tradicionales del varón ejerciendo el poder y mujeres en roles reproductivos y de cuidado”, afirmó la socióloga. A su vez remarcó que la participación femenina puede regularse por normativa, pero se necesitan organizaciones que acompañen y estén comprometidas con los objetivos de paridad. Del mismo modo, formas de seguimientos y control por parte de los organismos específicos que deben garantizar el acceso al ejercicio de este derecho. 

Reclamo a la CGT

La Corriente Federal de Trabajadores Argentina (CFTA) emitió un comunicado titulado “La CGT es con nosotras”.  Allí las trabajadoras señalaron que no fueron partícipes del debate y la decisión tomada por la CGT y exigieron que se cumpla la ley de cupo Nº 25.674 tanto en altos cargos y conducción. 

“El planteo de ‘Cargos titulares alternos’ donde las compañeras intervengan cuando los temas son ‘de mujeres’ o ‘secretarías con varones titulares y mujeres suplentes’ no tiene como fin la búsqueda de igualdad. Más bien entendemos que implicaría relegarnos a un segundo plano. Falta un número importante de compañeras en puestos de decisión dentro de la CGT. Tenemos vocación de representación y entendemos que no se puede seguir esperando: ya es tiempo de integrarnos a la conducción nacional”, señalaron desde Mujeres Sindicalistas.