La Contraloría General de Paraguay realizó una auditoría al programa de Alimentación Escolar y Control Sanitario. Fue uno de los trabajos más grandes y sensibles hechos por el organismo ya que se analizaron las provisiones distribuidas en los centros educativos estatales con recursos del Fondo Nacional de Inversión Pública y Desarrollo.

El informe señala que los recursos transferidos en concepto de alimentación escolar, por parte del Ministerio de Hacienda, se distribuyeron en un 25% al Ministerio de Educación y Ciencias (MEC), otro 25% a los municipios y un 50% para las gobernaciones/ departamentos. 

En el control realizado en los centros educativos de la zona de Asunción, donde el MEC proveyó la alimentación escolar, se observó la existencia de más alimentos entregados que estudiantes beneficiados. Lo que generó un costo total mayor del necesario.   

La Auditoría también encontró que 33 instituciones educativas que se encontraban en posición prioritaria para recibir los servicios de alimentación escolar no fueron beneficiadas con el Programa de Alimentación Escolar del Paraguay, motivo por el cual alumnos de instituciones de zonas vulnerables no fueron alcanzados.

Otro de los hallazgos del trabajo fue que departamentos con menor monto total, como Alto Paraná, Central, Itapúa y Caaguazú, beneficiaron a mayor cantidad de niños que el Ministerio de Educación y Ciencia y la Municipalidad de Asunción. 

En cuanto a las municipalidades, el informe detalla que un total de 56 no comunicaron sus llamados para el programa de Alimentación Escolar, pese a la obligatoriedad de los mismos. Además, se encontraron errores en alrededor de 30 municipios relacionados con las licitaciones, tanto por no adjudicación de las mismas o por licitaciones que no les correspondían a los municipios. 

Por último, la Auditoría subrayó la poca ejecución presupuestaria de varios de los municipios, situación que repercute directamente en la provisión de los alimentos.