Luego de abstenerse de opinar en 5 oportunidades, finalmente la Auditoria General de la Nación (AGN) aprobó los balances contables, correspondientes al año 2012, de Aerolíneas Argentinas (AA). GestionPublica.info propone en esta nota realizar un repaso de los últimos 25 años de la empresa estatal, desde su privatización hasta la recuperación en manos del Estado en el año 2008.

Como parte del programa de privatizaciones del ex Presidente Carlos Menem, en 1990, luego de modificarse su tipo societario, de Sociedad del Estado a Sociedad Anónima (ARSA), la empresa Aerolíneas Argentinas fue vendida a la estatal española Iberia (que adquirió el 85% de la compañía).

Iberia estuvo 4 años a cargo de AA y en ese lapso fue auditada con el objetivo de analizar la falta de inversión y las sanciones que debería haber recibido. Según informó la AGN, ARSA debería haber invertido en aeronaves, repuestos e infraestructura la suma de u$s 683.895.000 y sin embargo se invirtieron u$s 268.258.825, es decir el 39.20% de lo comprometido. El organismo de control agrega que a pesar de contarse con la posibilidad de hacer efectiva cualquier sanción, frente a los incumplimientos registrados hasta la celebración de los acuerdos de julio de 1992, ninguna de ellas fue aplicada a la empresa.

Los problemas internos de la licenciataria española la llevaron a la bancarrota y las acciones de Aerolíneas pasaron a la Sociedad Española de Participaciones Industriales, ente público de participaciones industriales del Estado español. Pero los inconvenientes volvieron con la crisis de nuestro país en el año 2001, momento en el cual AA estuvo al borde de la quiebra definitiva y desaparición. Sin embargo, tras recibir una inyección de capital (US$ 50 millones del Grupo Marsans), pudo retomar la prestación de los servicios inmediatamente y entró en 2002 en una convocatoria a acreedores.

En el momento que Aerolíneas Argentinas pasa a manos del Grupo Marsans, la AGN realizó un informe sobre la venta de las acciones, el cual concluye que el Estado Nacional no realizó actividades tendientes a supervisar y controlar la venta del paquete mayoritario de la sociedad controlante de ARSA. Y el ingreso de un nuevo "operador" de ARSA que dicha circunstancia pudo importar. Así INTERINVEST, tenedora del paquete mayoritario de ARSA se encontraría en manos de personas físicas o jurídicas de nacionalidad no argentina. Específicamente, la venta objeto de auditoría, surge de la propia manifestación de la parte compradora en el expediente.

En 7 años de gestión, el Grupo Marsans transfirió temporalmente aviones propiedad de Aerolíneas Argentinas a la empresa española Air Plus Comet que luego fueron devueltos totalmente destrozados e imposibles de reparar. Por estos acontecimientos y acusada de usar a AA para beneficiar económicamente a su grupo, en 2008 el Gobierno Nacional empieza a expropiar las acciones de Marsans y se declara a Aerolíneas Argentinas a través de una ley de  estatización como una empresa de Utilidad Pública.

Con la estatización llegan las auditorías contables y comienza un ciclo de abstenciones de opinión por parte de la AGN en los años 2008 (dos veces), 2009, 2010 y 2011. ¿Qué significa esto?, una abstención de opinión expresa que los auditores no pueden emitir un juicio sobre los estados contables que observan, ya sea por limitaciones al alcance de su trabajo o bien por la incertidumbre que generan los datos recabados.

Los datos arrojados por este balance muestran que la situación de la empresa sigue estando con números rojos. El informe afirma que al 31 de diciembre de 2012, los Estados Contables presentan una pérdida acumulada de $ 2.407.120.549, y un resultado negativo no asignado acumulado de $ 12.107.553.660.

Según el Presidente de la compañía y Pre candidato a Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Mariano Recalde, "la Aerolíneas de hoy es muy distinta a la empresa devastada que nos dejaron las gestiones anteriores". Y si se tiene en cuenta que para el Gobierno actual el gasto es considerado como una inversión, Recalde señaló que es un mito la afirmación de que la empresa pierde cada vez más plata".