Luís Jorge Cevasco, Fiscal General adjunto en lo Penal, Contravencional y de Faltas de la Ciudad de Buenos Aires, junto con Julio Baldomar, Vicepresidente del Club Atlético Velez Sarfield, participaron de la conferencia "Fútbol, violencia y delito: Cómo avanzar hacia la solución", que se llevó a cabo el 10 de julio pasado en la sede de la Universidad Empresarial Siglo 21.

Cevasco fue el primer orador de la jornada y, entre otras cosas, mencionó la falta de control que reina en el deporte más popular del país y la poca articulación entre los organismos encargados de garantizar la seguridad en los partidos.

El fútbol tiene una característica desde el punto de vista jurídico y es que está por encima de todo. El artículo 14 bis de la Constitución Nacional debería establecer el derecho al fútbol, de esa manera podríamos sortear todo lo que tiene que ver con el federalismo y con los controles institucionales y económicos a los que están sometidas todas las asociaciones civiles, ironizó Cevasco.

Hoy en día en el fútbol argentino, es común escuchar que un partido cambie de horario y de cancha en numerosas oportunidades y en algunas ocasiones puede no saberse hasta el día previo a la disputa dónde se juega. En general, esta situación es consecuencia de las condiciones de seguridad de los estadios o cierta puja política.

En relación a este tema, Cevasco afirmó: Clausurar un estadio en Argentina es más difícil que cerrar el Congreso de la Nación. Cuando uno habla con un Juez, con un Jefe de Gobierno, o con un Gobernador y le plantea que un partido no se puede jugar en determinadas condiciones y que hay que clausurar un estadio, empiezan a temblar.

Respecto a la seguridad, explicó que existe una falta de articulación entre los organismos de seguridad, encargados de los espectáculos deportivos y los gobiernos de la Ciudad y Nación: Según el artículo 29 de la Constitución, el Poder de Policía lo manejan las provincias, pero la seguridad de los partidos de fútbol en la Ciudad de Buenos Aires la maneja el Ministerio de Seguridad de la Nación porque hay un decreto del Poder Ejecutivo y porque al gobierno porteño le conviene no reclamar sus facultades jurisdiccionales. Se reparten los roles y las culpas. Nadie es responsable de nada.

Al finalizar su discurso, Cevasco pidió: Terminemos con el caretaje y con el doble discurso. Reconozcamos que el fútbol está por encima de todo o empecemos a actuar con una mínima madurez enfrentando los problemas. Porque cuando hablamos de fútbol nadie advierte la raíz de los problemas y la mayor traba es que no hay decisión política en ninguno de los estamentos del gobierno nacional, de la Ciudad o provincial para frenar esto.

Por su parte, Julio Baldomar se refirió a la responsabilidad de los dirigentes: Los directivos claramente tenemos mucha responsabilidad en el tema, pero no todos tienen el mismo grado ni la misma problemática. Cada club lleva el tema como puede, pero algunos como quieren, describió y además sentenció: La problemática tendría que pasar por la Asociación del Fútbol Argentino, pero la AFA es la última institución que está preocupada por la violencia en el fútbol. A los popes de la AFA les interesa poco. El todo pasa es un clásico.

En esa línea, se refirió al pacto realizado entre el Gobierno de la Nación y las barras de muchos clubes de cara al Mundial de Sudáfrica en 2010 y dijo: El gobierno, con lo de Hinchadas Unidas Argentinas, le dio una identidad a los grupos de asociaciones ilícitas. Además, cuando un equipo va a ir a jugar a la provincia, el CoProSeDe (Organismo de seguridad de espectáculos deportivos en el ámbito de la Provincia de Buenos Aires), negocia con el jefe de la barra. O sea, le están dando identidad a los barras y ese es uno de los problemas fundamentales, hay que desactivar los negocios que tienen, describió Baldomar.

En diálogo con gestionpublica.info, el Vicepresidente del Club Atlético Vélez Sarfield, sostuvo que del uno al diez, la lucha contra la violencia en el fútbol está cuatro puntos. Además, se refirió al sistema de empadronamiento que está evaluando la AFA para controlar el ingreso a los estadios y afirmó que yo tengo mis dudas, porque encarece mucho a los clubes, pero tal vez sea una solución. En Argentina ya no se qué realmente es una solución porque siempre va a haber una vuelta para que puedan ingresar.