Las preguntas que plantean estas páginas son pertinentes para quienes piensan y diseñan políticas públicas, para los investigadores y para los ciudadanos todos: ¿quiénes tienen hoy derecho a una existencia digna? ¿Cómo trazan los poderes públicos la frontera entre los que se salvan y los condenados a la expulsión?

En Por una repolitización del mundo, Fassin se propone devolver un sentido pleno a la política, que actualmente genera decepción y cuestionamiento en todas partes. Los trabajos de campo que durante los últimos treinta años realizó en tres continentes le permiten demostrar cómo, cada vez más, las desigualdades se inscriben en los cuerpos de las personas en términos de sufrimiento, los hechos de violencia se reinterpretan en el léxico del trauma y el pedido de justicia social se transforma en llamado a la compasión.

Releyendo a autores como Benjamin, Foucault, Derrida o Kafka, Fassin construye un alegato persuasivo contra la deshumanización de los otros, refuta los argumentos políticos e institucionales que rebajan el valor de la vida y a la vez recalca una pregunta inquietante: ¿cuáles son los límites de lo que una sociedad admite como tolerable? Así, este libro se vale de las herramientas más eficaces de las ciencias humanas y sociales para demostrar que la moral es también (y sobre todo) un asunto político.

Didier Fassin

Antropólogo y sociólogo, es profesor de Ciencias Sociales en el Institute for Advanced Study de Princeton y director de estudios en la École des Hautes Études en Sciences Sociales de París. Formado en medicina interna y salud pública, dedicó sus primeras investigaciones a la antropología médica en Senegal, Ecuador y Sudáfrica, en particular, a las políticas sanitarias y las desigualdades. Ha explorado, desde la perspectiva de la antropología moral crítica, la significación histórica, social y política de formas morales involucradas en las acciones cotidianas así como en las relaciones internacionales. Recientemente ha efectuado una etnografía del Estado mediante un estudio del complejo represivo compuesto por la policía, la justicia y la cárcel. En la actualidad se ocupa del castigo, la inmigración, las políticas de la vida y la presencia de las ciencias sociales en el debate público.