En Ecuador hay falta de claridad en torno a los derrames de petróleo
Entre 2005 y 2008 se registraron al menos 700 siniestros con crudo dentro del Distrito Amazónico de Petroproducción. Su Auditoría no obtuvo los datos sobre cuándo se originaron, cuál es el estado actual y qué daños generaron. En tanto, el organismo de control no tuvo acceso a la documentación que se necesita para respaldar el modo de adquisición y uso de los elementos para la limpieza.
Según un informe de la Contraloría General de Ecuador, “la información recolectada sobre los derrames de petróleo en el Distrito Amazónico de Petroproducción no permiten establecer la fecha y hora de los siniestros, el estado en el que se encuentra cada uno, las acciones realizadas, la afectación de propiedades ni la superficie total contaminada”.
Petroproducción es la filial de la Empresa Estatal Petróleos de Ecuador que se encarga de “la explotación de las cuencas sedimentarias y el trabajo de los campos hidrocarburíferos dentro del territorio ecuatoriano, que incluye la explotación y el trasporte del petróleo crudo y gas hasta los principales tanques de almacenamiento”.
La auditoría destacó la falta de información sobre el inicio de los derrames de crudo, que suman 712 entre octubre de 2005 y noviembre de 2008. También observó en la documentación brindada por la empresa que “en varios casos no fueron solucionados de manera inmediata y en otros tantos no figura la fecha en la que finalizó el siniestro”.
No obstante, “los informes ejecutivos indican que los derrames y limpiezas fueron resueltos en forma directa o a través de la contratación de empresas calificadas”, lo que “se contradice” a la información hallada por la Contraloría que indica que en algunos derrames la solución continúan “pendiente”.
Encontrarse con esta situación fue una sorpresa para el organismo de control ya que el objetivo original del informe era “examinar las compras y usos de materiales y equipos utilizados en derrames de crudo”.
Ahora sí, las compras
Para realizar las adquisiciones necesarias para afrontar los derrames de petróleo, Petroecuador asignó U$S 4.864.473. En relación, la Contraloría señaló que “no hay información ni documentación completa que permita identificar la entrega y utilización de elementos para emergencias y limpiezas, cuyo valor asciende a U$S 799.128”.
También hay bienes por U$S 282.534 que “si bien están descritos en los pedidos, no fueron entregados en su totalidad a la unidad solicitante” y casos donde “se desconoce quiénes fueron los servidores que retiraros los materiales y cuál fue su destino y utilización”.
Made in Ecuador
Sobre la compra de materiales nacionales, los auditores se encontraron con la falta de documentación suficiente como para poder evaluar la adquisición y entrega de elementos que realizó Petroproducción. Sin embargo, pudieron detectar en reiteradas oportunidades que desde que se solicitaron los bienes hasta que ingresaron a la bodega “transcurrieron largos períodos –que superaban los dos meses- a pesar que eran compras locales y por bajos montos”. De hecho, hubo un caso puntual en el que “el área recibió el material cuatro años y seis meses después del plazo de entrega establecido”.
Cargo directo
Algunos materiales absorbentes y equipos no fueron registrados y puestos en stock sino que fueron entregados directamente a las áreas que necesitaban el pedido, bajo la modalidad de cargo directo. Es importante señalar que la Contraloría no encontró “evidencia de que Petroproducción tenga una base legal que le atribuya a los solicitantes a comprar materiales mediante esta forma”.
Además, “no hay ninguna planificación en la adquisición de bienes y maquinaria que permita el cumplimiento de las necesidades del Distrito Amazónico, lo que originó que algunos elementos permanecieron en bodega por más de cinco años sin ser utilizados”.
Una cuestión de precios
Para llevar adelante sus labores cada unidad solicita la compra de insumos, para los cuales la organización tiene una guía de precios para cada uno. Sin embargo, “esos valores no están al día con el mercado” debido a que “el sistema registra como precio actualizado el de la última compra más allá de la fecha en la que se haya realizado”. Con el objetivo de intentar solucionar éste problema, se creó el área de “Inteligencia de Mercado” encargada de “actualizar esos valores”. Sin embargo, al cierre de la auditoría, el problema persistía.