Se vienen las sesiones ordinarias en el Congreso y esta relación entre la Presidenta y el vicepresidente nos pone a todos los argentinos de espectadores...

Lamentablemente, lo que allí se produce es un fenómeno más personal que institucional, por lo cual sufren más las instituciones que las personas, y también lo que muestran es cierto manejo arbitrario y discrecional en la toma de decisiones públicas, buscando recortar determinadas funciones, aunque sea informalmente, del cargo del vicepresidente de la Nación. Sin embargo, el Senado va a sesionar a partir del 1 de marzo como lo establece la Constitución Nacional;en todo caso, en el ámbito del Senado el vicepresidente tiene la presidencia, con lo cual tiene atribuciones, derechos y obligaciones para tomar decisiones.

¿Han presentado algún tipo de informe desde Poder Ciudadano?

Lo que estamos haciendo tiene que ver con el uso del recurso público con fines electorales y lo que hemos publicado es con respecto del uso de vehículos, aviones, helicópteros por parte de Néstor Kirchner para ser trasladado a actos partidarios. También estamos trabajando en la petición del fiscal de la Oficina Anticorrupción para que reglamente el registro de obsequios a los funcionarios públicos, que debería haberse hecho hace diez años. La Ley de Ética Pública establece la prohibición a la recepción de obsequios por parte de la administración pública nacional, sin embargo, regula la recepción de obsequios de cortesía y protocolo y con eso establece la creación de un registro donde el funcionario establecería qué obsequios ha recibido y se decidiría cuál es el destino que se le va a dar, un destino de propiedad de todos, pasa a ser patrimonio nacional. En el último año venimos siguiendo los obsequios recibidos por la Presidenta, por ejemplo dos computadoras muy caras por parte de un empresario y, justamente, estos regalos no entran por cortesía y protocolo, por lo cual ella debería haber rechazado esos regalos.